Te damos los trucos para no tener que pasar por uno de los momentos más complicados del año. El temido ¡Síndrome postvacacional! Un verdadero trauma para algunos, sobre todo para aquellos que retornan a una situación laboral poco favorable, incluso hostil en ocasiones.
La desdicha y el desánimo llegan para quedarse y se comienza a atisbar en la lejanía las próximas vacaciones, lo que aún deprime más. El cambio en los horarios y la modificación de las horas de sueño son también factores determinantes.. y ¡con todo esto en contra! ¿Qué podemos hacer?
¿Sabes que necesitamos 21 días para que lograr una completa transición y que los primeros días son los más complicados?
Y es que, según los expertos, «un hábito necesita 21 días para implementarse, y un mes de vacaciones es tiempo más que suficiente para que una persona se acostumbre a los nuevos hábitos de vida». El retorno, evidentemente, necesita el mismo margen.
A ver si reconoces los principales síntomas del síndrome postvacacional: apatía, cansancio, falta de concentración, nerviosismo, estrés, tristeza e insomnio. Suelen durar unos 15 días, y con un poco de suerte a las cuatro semanas ya volvemos a nuestro «yo habitual». En casos graves puede llegar a provocar estados de ansiedad, trastornos digestivos y taquicardias.
Hay dos elementos claves para evitar el síndrome postvacacional: la prevención y el pensamiento positivo.
Primero, anticiparnos a la vuelta y regresar a la rutina unos días antes del oficial, es decir, no dejar la maleta por la noche e incorporarnos al trabajo a la mañana siguiente.
Además, los primeros días es aconsejable levantase una media hora más de lo normal para ir al trabajo sin prisa y retomar las tareas laborales de forma gradual. Hay que tomarse la vuelta con «filosofía» y dedica el primer día a compartir tu verano con los compañeros ¡Seguro que te reirás con las anécdotas que tienen que contarte!
Hay que pensar en positivo: «tengo trabajo y gracias a él puedo disfrutar de un nivel de vida aceptable, gozar de tiempo de ocio y cubrir mis necesidades». Y es que el día tiene 24 horas, y ¿sabes algo bueno? Que tu trabajo sólo te ocupa una tercera parte del mismo. Así que cuando hayas terminado tu jornada laboral, dedica el resto del día a practicar actividades que son de tu agrado o para estar con los amigos o con la familia.
¿Te cuento otro secreto? Hazlo todo con una sonrisa. Sonriendo no sólo serás feliz, sino que además harás más felices a los que te rodean y crearás un mejor ambiente de trabajo.
Márcate nuevos objetivos y planifica lo que te apetece hacer el fin de semana. Si añadimos deporte y alimentación sana a nuestra vuelta, el éxito del retorno está asegurado
Acompaña tu regreso con la mejor música, la de Cadena Dial. ¡Dale al play y déjate llevar!
