Una medida rotunda pero necesaria tras los reiterados accidentes sufridos tanto por los modelos iniciales como por los que servían de reemplazo y que demostraron que el error que hacía estallar la batería no estaba resuelto.
A esto se une que tres de las grandes operadoras de móvil en USA hayan ofertado a los clientes la posibilidad de cambiar sus terminales Samsung por otros de valor equivalente. Un auténtico fiasco para la empresa que ve como el móvil, al que expertos habían catalogado como el mejor Android hasta el momento, se ha convertido en su gran fracaso
La reacción de Samsung ha sido ofrecer a los consumidores la devolución del teléfono en el punto de venta o a través de Internet para recibir un modelo similar pero con el problema resuelto. Los nuevos cuentan con un icono de batería en color verde con para diferenciarlos de los anteriores