¡Nuestro Maspi es el carro de los golpes! Este fin de semana, sin ir más lejos, se hizo una brecha en la frente con una puerta y nos ha dado por pensar en golpes y caídas tontas. Los atrevidos no han dejado de llamar para contarnos sus «pequeños accidentes», como Rosi, que a tres meses de su boda se rompió la nariz al darse contra un balcón.