Cómo perder de 10 a 30 kilos de forma saludable

La Nutricionista de la Bata Roja

Más de la mitad de la personas (66%) que acuden a una consulta nutricional tienen el índice de grasa visceral alto o muy alto, según un estudio realizado por Super Premium Diet, empresa líder en el asesoramiento nutricional en farmacias. “Un dato alarmante debido a la gran importancia e influencia de la grasa abdominal en las enfermedades cardiovasculares y el síndrome metabólico”, explica Marta Gámez, directora técnica de la empresa. Los resultados del estudio desvelan que el 40% de las personas que acuden a los nutricionistas lo hacen cuando ya tienen obesidad; mientras que solo el 20% de las consultas son de personas con un índice de masa corporal normal pero que tienen interés en cuidarse.

¿Por qué esperan tanto para ponerse a dieta?

Según esta empresa líder en asesoramiento nutricional, a la hora de ponerse a dieta surgen numerosas excusas como: “No me pongo a dieta porque enseguida me entra ansiedad y me puede el picoteo” o “no puedo desayunar y los nutricionista me aconsejan hacerlo” o “no soy capaz de cenar ligero porque es cuando más hambre tengo y no puedo privarme de una buena cena”. Sin embargo, ordenar y planificar las comidas adecuadamente, reduce en gran medida la sensación de ansiedad. Realizar cinco comidas al día evita la ansiedad y el llegar a las comidas fuertes con demasiada hambre, por lo que se pueden realizar unos menús más ligeros. También hay que tener en cuenta la importancia del desayuno o de un mal desayuno en el sobrepeso: “Es necesario dedicarle tiempo suficiente a esta primera comida del día y acostumbrarse a ingerir los alimentos poco a poco, lo que da energía para afrontar el día y evitar el picoteo”, afirma Marta Gámez.

La semidieta, ideal para personas con ansiedad           
Para aquellas personas con ansiedad que no consiguen seguir una dieta, Super Premium Diet recomienda la semidieta. Una opción que permite comer con normalidad durante la primera mitad del día y realizar dieta solamente a partir de las seis de la tarde para reducir la ingesta de calorías de cara a las horas de descanso, en las que necesitamos mucha menos energía. De este modo, se introduce a la persona en una dieta completa progresivamente y se evita la sensación de ansiedad. “La semidieta hace posible que aprendamos a cuidar nuestra alimentación poco a poco, sin que esto suponga una carga, y que la alimentación saludable se vaya convirtiendo en una costumbre”, finaliza Gámez.