Sin duda algo que ya comienza a preocuparnos a los consumidores es la subida de la cesta de la compra, algo que comenzamos a notar ya hace meses. El pasado mes de Abril la OCU ya hablaba de una subida de «más de 500 euros al año». Una subida que supone en torno a un 15 %, según la organización de consumidores.
Todo ello hace que a la hora de ir al súper, nos inclinemos por los productos más baratos, que suelen ser los procesados, alejándonos así de los beneficios de la dieta mediterránea. Algo que a la larga conduce a una subida en las cifras de obesidad (un 53% de los adultos y un 20% de los menores), además de tal y como recoge El Mundo, » hipercolesterolemia (15,5%), diabetes (7,5%) e hipertensión (19,3%). Y, a su vez, estos son factores de riesgo de otras enfermedades como las cardiovasculares …».
Hace unos días hablábamos precisamente de la iniciativa de la cadena de supermercados Carrefour para hacer algo más llevadera al consumidor la subida de precios, de sacar a la venta una cesta con treinta productos básicos de primera necesidad por un precio de treinta euros. Una iniciativa que no ha estado exenta de polémica respecto a si se trata de una cesta equilibrada y saludable.
Así debe ser tu cesta de la compra
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En este sentido la doctora especialista en Endocrinología y Nutrición del Hospital HM Modelo de La Coruña, Iria Rodríguez, explica al mismo medio que lo primero que hay que tener en cuenta para que una compra sea saludable es que, «la cesta sea adecuada en cantidad (para no desperdiciar comida), variada y equilibrada» y añade, «es la dieta mediterránea, rica en frutas, verduras, legumbres, cereales integrales, frutos secos y aceite de oliva virgen extra, y con un mayor consumo de pescado que de carne, y procurando que ésta última sea preferiblemente magra».
Según la especialista en nuestra lista de la compra debemos incluir verduras, fruta, legumbres, tubérculos, cereales integrales, frutos secos, semillas y aceite de oliva, además de huevos, lácteos y carne baja en grasa. Además señala como una muy buena opción el pescado y la verdura congelada, siempre que se haya respetado la cadena de frío, ya que a nivel nutricional no hay diferencia con el producto fresco y es una opción más económica.
Con respecto a los alimentos procesados no tiene ninguna duda, debemos huir de ellos por muy baratos que sean ya que ,«Contienen exceso de sal, azúcar, grasas… Hablamos de pizzas, los precocinados, la bollería, galletas o las carnes procesadas del tipo salchichas y beicon», explica.
Incluso dos recientes estudios, publicados en la revista The British Medical Journalrelaciona su consumo con un mayor riesgo padecer enfermedades como las cardiovasculares, el cáncer colorrectal o incluso la muerte prematura.
