Los rizos de David Bisbal también conquistaron Japón. En pleno territorio nipón, el artista hizo historia. Y todo gracias a una canción que, aunque aquí sonaba con fuerza en 2007, allí se convirtió en un auténtico fenómeno: Oye el boom.
Bisbal acababa de lanzar su álbum Premonición. Tras arrasar con su gira por América, decidió dar un salto todavía más grande hacia el mercado asiático. Lo hizo con un as bajo la manga, su colaboración con Hiromi Go, un artista local que versionó la canción en japonés. Resultado: un dueto explosivo que conquistó las radios del país.
Los fans japoneses lo esperaban en el aeropuerto como si de un ídolo local se tratara. Bisbal se convirtió en estrella nipona, con sesiones de firmas de discos abarrotadas. Y sí, hay imágenes que lo prueban. El creador de contenido David Andújar fue quien rescató este momento en su perfil, compartiendo imágenes en las que el almeriense interactúa con sus fans asiáticos.
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Por aquel entonces, Bisbal ya había cerrado con broche de oro su Premonición Tour por América Latina, que lo llevó a recorrer Colombia, Venezuela, México, Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Ecuador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Costa Rica. Con semejante recorrido internacional, ¿por qué no dar el salto a Oriente? Dicho y hecho.
Además, aquel lanzamiento no se quedó en un tema suelto. Bisbal incluso publicó un álbum recopilatorio para el mercado japonés. Así, el almeriense se consolidaba como uno de los pocos artistas españoles capaces de sonar en la otra punta del planeta con la misma fuerza que en casa.
Ahora, la historia ha resucitado en redes y los fans no dan crédito. El «boom» de Bisbal en Japón fue real y dejó huella.
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