
Vanesa Martín ha descrito su canción ‘Tenemos Universo de Sobra’ como un viaje hacia un tipo de amor que no puede sostenerse en el mundo físico. La artista andaluza explica que esta composición recoge “historias que no pueden existir en lo terrenal, porque pertenecen a otra dimensión. A esa donde las almas se reconocen, se recuerdan, se intuyen”. Para ella, el amor a veces rebasa la lógica y el tiempo. Se sitúa en un lugar intangible.
La letra de la canción refuerza esa idea: “Si quisieras esperarme en otra vida / yo estaría dispuesta a llegar sin hora”, canta Vanesa, haciendo alusión a la eternidad de un sentimiento que no encuentra espacio en el presente.
Pablo Alborán también ha buceado en territorios similares con ‘Saturno’. El malagueño compuso este tema inspirado por el cuadro de Goya ‘Saturno devorando a su hijo’, reflexionando sobre el tiempo y todo lo que no llegó a ser. “Saturno es Cronos, el dios del tiempo en la mitología griega. Me pareció interesante jugar con la idea de todas las cosas que podrían haber pasado en una relación y que no han pasado”, explicó el cantante.
En ‘Saturno’, Alborán canta: “En Saturno viven los hijos que nunca tuvimos / en Plutón aún se oyen gritos de amor”. Así imagina un universo paralelo donde la nostalgia encuentra refugio en los planetas, como si el sistema solar pudiera acoger esas emociones que la realidad no permite.
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