El exceso nunca es buen compañero de viaje. Se trata de una verdad universal, igual que el agua moja o que nadie cocina mejor que mamá. Superar los límites en sentido positivo puede ser contraproducente, incluso tratándose de algo tan serio como la salud. ¿Presumes de dejarte la boca más limpia que una patena con todos los productos de higiene que tienes a tu alcance?
Debes saber que quizá no estás siendo tan responsable como crees. Y es que, la comunidad científica muestra unanimidad al respecto: abusar de los enjuagues para la boca incrementa las posibilidades de sufrir diabetes. Como lo estás leyendo.
Para demostrarte que no estamos tomándote el pelo, citamos dos de los últimos estudios que corroboran esta afirmación. En primer lugar, un grupo de expertos sometió a estudio a mil voluntarios. Este experimento arrojó resultados reveladores. Aquellas personas que hacían gárgaras con líquidos limpiadores durante dos o más veces al día mostraron un 55 por ciento más de opciones de desarrollar diabetes.
Y no solo fue esta la consecuencia negativa, sino que abusar de los colutorios también aumenta el riesgo de padecer obesidad. Así que, por mucho que te esfuerces con la dieta, tu rutina de higiene bucal puede echar por tierra tu esfuerzo. Debes saber, además, que este proyecto no se limitó a observar a los participantes durante una semana, un mes o un año. El estudio se prolongó por espacio de tres años.
Por otro lado, varios profesionales de Alabama dan el visto bueno a este dato. Con una muestra similar al del anterior grupo de expertos, estos científicos demostraron la misma afirmación. Además, cayeron en la cuenta de que aquellas personas que solo usaban el elixir una vez al día no experimentaron riesgo de sufrir la temida diabetes.
Llegados a este punto, te estarás preguntando por qué razón puede ocurrir esto. El motivo reside en la capacidad de estos colutorios para eliminar las bacterias que producen el mal aliento y conforman la placa dental. Los enjuagues destruyen estos gérmenes, sí, pero algunas marcas se encargan también de acabar con las bacterias que participan en la regulación de los niveles de glucosa. Hablamos de esos microorganismos que contribuyen a producir óxido nítrico, el compuesto químico que se encarga de mantener el azúcar en el cuerpo.
Como estás viendo, la comunidad científica no recomienda el abuso de estos productos para la salud bucal, aunque sí su uso moderado. Utilizar este elixir con cabeza te puede hacer mucho bien. Eso sí, también has de tener en cuenta que el mismo colutorio con el que te enjuagas cada mañana, tras cepillarte los dientes, puede no servir para tu pareja o para tu hijo. De hecho, tu niño necesitará un líquido rico en flúor para evitar las caries (y en una dosis acorde a su edad, por supuesto).
Lo ideal es acudir a voces expertas para que te asesoren y te saquen de dudas respecto a este tema tan delicado. Quizás tienes las encías inflamadas y necesitas un líquido especial con aceites pensados para solucionar este inconveniente. Tal vez tus dientes son especialmente sensibles al frío y a ciertos alimentos como los cítricos o los refrescos azucarados y te va mejor otra marca.
Sea como fuere, y tras leer las recomendaciones de los expertos, seguro que ya tienes claro qué has de cambiar en tu rutina de higiene dental. Tras el cepillado, enjuagarse con el colutorio adecuado es recomendable. Pero, ya sabes, el abuso no conduce a un buen fin.
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