Sólo necesitarás un set de moldes de polos, frutas frescas y el congelador . Sin duda una buena alternativa para que nuestros niños además de estar hidratados coman fruta a diario.
Te contamos cómo puedes hacerlos tú misma en casa, pero primero los ingredientes.
Echa el zumo de un limón en el primer molde, añade arándanos y cierra el envase. A continuación echa el zumo de naranja en el segundo molde, añade trocitos de fresas y ciérralo y en el último molde añade zumo de sandía, incorpora el kiwi y cierra.
Cuando los sirvas puedes añadir una macedonia de frutas o unos trocitos de sandía, arándanos o grosellas que además están llenas de antioxidantes que ahora vienen muy bien para protegernos de las radiaciones solares.
Para los que prefieren los sabores más clásicos te damos la receta de los polos de fresa y plátano.
Para ello mezcla en un bol un plátano grande maduro troceado, 12 fresas cortadas por la mitad y 120ml. de zumo de piña o de naranja, tritúralo todo con la batidora hasta que quede una mezcla que luego echarás en los moldes y debes dejar en el congelador toda la noche.
Para sacarlos del molde ponlos debajo del grifo con agua tibia y conseguirás sacarlos con facilidad.