TardeAR, el programa de Ana Rosa Quintana en Telecinco, está más que asentado en la cadena tras ocupar este verano la franja de Sálvame. Aunque las audiencias no terminan de ser boyantes ni consigue resaltar frente a la competencia, la presentadora y el resto de colaboradores continúa cada día defendiendo su labor al frente del programa.
Este jueves la mesa VIP de TardeAR debatía sobre un tema que está muy de actualidad: mandar la ubicación a tu pareja para evitar las desconfianzas. Una práctica que, si bien algunos ven como una demostración de amor, esconde para otros un método de control y toxicidad entre los miembros de la pareja.
El tema dividió Xavier Sardá y Mario Vaquerizo, colaboradores del programa. Beatriz Archidona, que actualmente ocupa el papel de presentadora con motivo de las vacaciones de Navidad de Ana Rosa Quintana, planteaba una situación al cantante de Nancys Rubias: «Si a ti de repente Alaska te dice ‘oye, mira, Mario, para estar más tranquila cuando sales a tomar algo mándame la ubicación para saber dónde estás’, qué pensarías«.
El también humorista contaba que él y su mujer son muy diferentes, y que a veces es ella la que sale y le pide que no vaya con ella. «A mí me suele decir bastantes veces ‘voy a dar un paseo, mejor no vengas conmigo’ y le pregunto por qué y me dice que porque habla con todo el mundo. O sea que no, somos muy diferentes«, contaba.
Xavier Sardá busca las cosquillas a Mario Vaquerizo en TardeAR
Vaquerizo apuntaba que «en las parejas no es una cuestión de ocultar, porque al final todo se sabe cuando te miras a los ojos«. Este comparaba el supuesto con otra práctica en las relaciones: mirar el móvil de tu pareja. «Me parece una falta de respeto«, expresaba este. «Eso, perdona, es un delito«, apostillaba Xavier Sardá.
Como buscándole las cosquillas al cantante, Sardá le recordaba un episodio muy conocido de su vida: «Qué más hubieses querido tú que estar conectado en Japón cuando te quedaste a dos velas y perdido«. Hasta sus compañeros en plató no perdieron la oportunidad de mencionar que había sacado los «trapos sucios» con esta información. Un ‘golpe bajo’ que su compañero trató de ‘torear’.
«Eso era porque no tenía cash y, por mucho que sepamos la ubicación, mi mujer no puede venir en un dron desde España a Japón o viceversa«, se defendía Vaquerizo, que continuaba diciendo: «Esa cosa de querer demostrar en cada momento dónde estás no es bueno para nadie, y en el amor mucho menos porque, si desconfías de tu pareja, a otra cosa mariposa«.
Un comentario al que siguió una nueva réplica del catalán: «Cuidado con lo que acabas de decir. ‘Si desconfías de tu pareja, a otra cosa mariposa’. O sea que tú desconfías y a lo mejor injustificadamente, ¿pero a otra cosa mariposa? Vaya por Dios». Xavier Sardá hizo notable que no estaba muy amable con su compañero, y Vaquerizo reconocía que «está picado hoy conmigo por una cosa«, aunque no revelaba de qué se trataba.
