Esta semana Jessica contaba a sus compañeros que hace tiempo que no tiene olfato, algo que además es hereditario ya que su madre tampoco lo tiene, explicaba. Además contaba como cuando comenzó a cocinar, hace diez años para su hijo, llamaba a su madre para las recetas e iba probando las comidas. Aunque ahora lo hace de distinta manera.
Además de normalizar lo que le pasa, ha contado que para suplir el olfato en la cocina ha intentado potenciar al máximo el sentido del gusto para poder cocinar así mejor. «Ahora sé lo que falta en los platos por el paladar», explicaba.
Pero este no fue el único tema del que habló la ex de Kiko Rivera, también habló de cómo empezó su relación con su actual pareja, Pablo Marqués, con el que ha reconocido estar muy feliz.
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Sin embargo, confesaba que «al principio le costó comenzar su relación y confiar porque estaba en un momento de su vida en el que no le apetecía estar con nadie, pero que finalmente vio que merecía la pena su noviazgo», explican desde Lecturas. Jessica reconoció además que le preocupa que su chico esté molesto por lo poco que está hablando de él en la casa, pero dice que no quiere que siempre se la relacione con las parejas con las que está.
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