«No creo que mi padre pueda volver a la televisión«, ha confesado con pesar Irene Gil. Una mala noticia para los seguidores de su padre que tanto ansiaban su vuelta para poder disfrutar de su talento en la actuación. Cabe recordar que han pasado ya dos años desde que el actor sufrió el ictus por el que ha tenido que abandonar su profesión.
En sus declaraciones a la revista Pronto, es la hija quien comparte la extensión de las secuelas que José Luis Gil está enfrentando actualmente. «Tiene movilidad, pero no es un hombre muy joven. Mi padre reconoce a todo el mundo. Si viene alguien a verle, sabe quién es, se entera de todo, pero tiene problemas para comunicarse», ha detallado.
La situación es tan grave que Irene, a pesar de haber mantenido siempre la esperanza en sus declaraciones en redes sociales, no ofrece un pronóstico especialmente positivo sobre la posible vuelta del intérprete a su trabajo. «Yo no lo veo, pero ojalá me equivoque y todo cambie a mejor en el futuro. Aunque el paso del tiempo te hace perder las esperanzas», asegura. La recuperación de José Luis Gil está resultando ser mucho más complicada de lo deseado por todos. «Hemos hablado con los neurólogos, con el centro de rehabilitación y, aunque nadie nos dice que no haya nada que hacer, tampoco apuntan a que la situación se arregle«, detalla Irene.
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