Jorge Javier Vázquez

Mediaset renueva su código ético y Sálvame es probablemente el programa más afectado

Alessandro Salem, el nuevo nuevo consejero delegado  ha sido el promotor

Ana Más

Mediaset acaba de renovar su código ético para los trabajadores de la cadena, que tendrán que cumplirlo estrictamente si quieren mantener su puesto de trabajo. Desde que se anunciara la salida de Paolo Vasile, había rumores de que la cadena programaba cambios y es que tal y como apuntan desde elmundo.es, «La nueva cúpula del grupo de comunicación quiere cortar de raíz algunas de las prácticas que más problemas han generado en los últimos años».

Alessandro Salem, el nuevo nuevo consejero delegado  ha sido el promotor de este nuevo código ético en el que  ha dejado bien claro que no va a tolerar ningún incumplimiento por parte de ningún trabajador, además de «colaboradores, clientes y resto de terceros que mantengan relaciones profesionales con Mediaset», que también se verán afectados por el mismo.

«No se tolerará ningún incumplimiento» del mismo y  de hacerse se considerará «falta laboral» sancionada como tal, explican. El grupo ya ha dado a conocer el documento a empleados internos y externos, que entra en vigor hoy y se suma a la decisión de apartar a 13 de los personajes que han dado más contenido durante años a Telecinco, Rocío Carrasco, José Ortega Cano o Bárbara Rey, entre ellos.


Código ético Mediaset, más epígrafes añadidos

 

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En él además de mantenerse los apartados del anterior Código Ético, que se aprobó en 2011, se añaden algunos nuevos,  cómo un epígrafe al que han llamado Principios rectores en programas de entretenimiento, que supone una prohibición muy concreta a los presentadores que, «no podrán dar su opinión, preferencia o hacer comentarios políticos», algo que solo se va a permitir en el caso de que el programa en cuestión tenga alguna sección de actualidad política, cómo en el caso de El Programa de Ana Rosa.

Salem ha incluído ocho puntos más en el documento en cuestión, que van a afectar spbre todo a Sálvame. Y es que otro de los epígrafes se refiere a «las guerras entre programas», y especifica que presentadores y colaboradores «no deben atacar o criticar a ningún otro programa de la compañía o a sus presentadores y colaboradores».

El tercer epígrafe  hace alusión a la salida de un plató en directo, una práctica habitual en Sálvame también, «no se puede abandonar en directo y sin causa justificada el programa»De hacer, «se tendrá por definitiva a efectos contractuales».

Otro de los puntos hace referencia a que los presentadores «deben conducir y ordenar el curso del programa…deteniendo de inmediato cualquier iniciativa de cualquier colaborador o participante del programa que pueda dar lugar a una evidente responsabilidad penal o civil». Y además hay una referencia a los contenidos y expresiones utilizadas en los programas que «deben ser acordes a la franja horaria en la que se emite».

Los programas tampoco podrán revelar datos de carácter personal de terceros, «que no sean notoriamente públicos», ni tampoco documentos que contengan sus datos. Tampoco se permitirá ninguna manifestación publicitaria que no haya sido previamente comunicada por escrito a Publiespaña, además de prohibirse lógicamente mostrar imágenes de víctimas de violencia de género o de bullying.