Shakira ya reside oficialmente en Miami. Allá se fue para alejarse del asedio continuo de la prensa y los fotógrafos a las puertas de su casa tras su polémica separación de Gerard Piqué.
Han sido casi 10 años viviendo en la ciudad condal, donde nacieron los dos hijos de la ya ex pareja, Milan, de 10 años, y Sasha, de 8.
En Barcelona seguirá residiendo el futbolista. Allí acudirán los pequeños en las ocasiones en las que deban estar con su padre, pero su día a día lo harán al otro lado del Atlántico donde la cantante ha comprado una casa que se convertirá en su nuevo hogar.
Fue el acuerdo al que la pareja llegó con abogados de por medio. De hecho, su marcha de España no ha estado exenta de habladurías ya que parece que el padre de Piqué dio a la artista una semana para abandonar el chalet familiar donde residía con sus dos hijos.
Per parece que las cosas no han cambiado mucho tras una semana en Miami. La prensa sigue persiguiendo a madre e hijos… por lo que Shakira ha decidido compartir un comunicado, en español e inglés, distribuido en su cuenta de Twitter personal, para pedir el cese del hostigamiento.
Shakira: «Se merecen vivir una vida sana y feliz»
En este comunicado, Shakira ha pedido a la prensa y los paparizzis que dejen de perseguir a sus hijos y que les permitan vivir con normalidad su infancia. Y es que las cámaras siguieron a Shakira y a sus hijos —Milan, de 10 años, y Sasha, de 8— hasta el aeropuerto cuando volaron hacia Miami.
«Apreciados amigos, periodistas y medios de comunicación, en este momento de cambios en mi vida como figura pública, es comprensible que exista una permanente curiosidad por parte de la prensa alrededor de mí y mi familia…Sin embargo, mis hijos, Milan y Sasha han vivido un año muy difícil, sufriendo un incesante asedio y una persecución sin tregua por parte de los paparazzi y varios medios de comunicación en Barcelona…Ahora que inician nueva etapa en sus vidas pido encarecidamente que por favor respeten su derecho a la intimidad…dejen de seguirlos a la salida o entrada del colegio, que no les esperen en la puerta de casa ni les persigan hasta sus clases extra-escolares como ha ocurrido meses atrás en Barcelona«.
La colombiana ha hecho un llamamiento a la sensibilidad de la prensa y los paparazzi ante la situación de los pequeños para que «puedan comportarse de la forma más humana posible con ellos, teniendo en cuenta que se trata de la salud y la integridad física y emocional» de los menores.
«Extiendo esta petición ya no como artista, sino como madre que desea proteger y cuidar del bienestar psicológico y emocional de sus hijos, para que puedan vivir una vida sana y feliz, como todo niño merece«, ha finalizado la cantante.
