
Y es que hay investigaciones que sugieren que elegimos uno u otro color a la hora de vestirnos, según nuestro estado de ánimo y es que normalmente asociamos los colores claros a la alegría y el optimismo y por el contrario, asociamos los colores oscuros a la tristeza. Pero además de en nuestras propias emociones, los colores con los que nos vestimos, tienen un impacto directo en cómo nos ven los demás. Hoy nos detenemos en uno en concreto, el azul.
Tradicionalmente «el color azul se ha relacionado con la paz, con la seguridad en uno mismo, con el espíritu libre y con la capacidad de emprendimiento«, explican desde Ok Diario, desde donde cuentan las razones que da la psicología del color para explicarlo.
Pero esto no es lo único positivo de vestirnos de azul, hay expertos que consideran que puede ayudarnos en el entorno profesional, ya que las personas que utilizan este color; «son percibidas como personas más confiables y honestas, que aquellas que optan por otros tonos más llamativos«, explican y esto no solo afecta al entorno laboral sino que también nos ayuda a crear vínculos más profundos y auténticos, fuera de este.
Además, el azul en sus tonos más claro ayudan a estimular el pensamiento y a mejorar la concentración, debido a la sensación de calma que este color produce, que son factores esenciales para mantener la mente despejada.
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