El boom de la cirugía para crecer: la tendencia entre los hombres de operarse las piernas
Los complejos de estatura motivan intervenciones que pueden llegar a costar decenas de miles de euros y dejar secuelas
¿Sabías qué hay hombres dispuestos a romperse las piernas para ganar altura? Sí, literalmente.
La operación, conocida como alargamiento óseo o cirugía estética de estatura, consiste en romper los huesos de las piernas, generalmente los fémures, y colocar un clavo electromagnético fijo que se va alargando progresivamente. El hueso se fragmenta, se introduce el dispositivo, y luego comienza el proceso de separación y regeneración ósea.
El fenómeno se extiende
Aunque este tipo de cirugía no es nuevo en personas con patologías específicas, lo que ha cambiado es que ahora hay hombres entre 20 y 45 años , sin enfermedad previa, interesados solo por la estética.
En España, empiezan a surgir clínicas especializadas, como el Instituto Downey en Sevilla, que ofrecen estos procedimientos también para personas de fuera.
Costes, riesgos de la cirugía y recuperación
Lo primero que sorprende de esta operación es el precio. Entre 50.000 y 200.000 euros por ganar unos centímetros extra, según lo ambicioso que sea el objetivo. Un lujo al alcance de muy pocos.
Pero el dinero no es lo único que se pone en juego. La recuperación es lenta y dolorosa, cada centímetro implica alrededor de un es de convalecencia en el que el paciente no puede caminar con normalidad.
A eso se suman las posibles secuelas físicas: infecciones, problemas de movilidad, dolor crónico o incluso que el hueso no llegue a soldar bien tras la intervención.
Y más allá del cuerpo, está la mente. La mayoría de hombres que se someten a esta cirugía lo hacen tras años complejos y burlas por su altura. Algunos confiesan haber pasado media vida utilizando alzas en los zapatos para disimular.
Inspiración: ‘Materialistas’
La película de Materialistas aborda precisamente este tema, cuestiona hasta qué punto los estándares de belleza y materialismo impulsan decisiones extremas, como gastar grandes sumas de dinero o asumir riesgos médicos para cumplir con ideales de imagen corporal.
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