
Y es esta última la que está de celebración, ya que el artista ha querido compartir con todos nosotros su videoclip oficial con el objetivo de agradecer todo el cariño que recibe desde hace tantos años pase lo que pase.
El artista se ha refugiado en dos de sus lugares seguros para grabar esta pieza audiovisual; el primero de ellos el estudio de grabación, el lugar en el que sus pensamientos y vivencias se convierten en canciones y del que ya han salido algunos de sus éxitos, y en segundo lugar su casa, su hogar, el sitio en el que tanto él como su familia disfrutan de la vida más allá de la música.
Pero también hay tres elementos que no se pueden pasar por alto en el nuevo videoclip de Alejandro Sanz. Uno de ellos es la guitarra, que es el instrumento principal de la melodía del tema, y además se ha rodeado de partituras simbolizando su conexión con toda su labor profesional. Como no podía ser de otra manera, el vino también cobra un peso fundamental en la pieza.
Con el objetivo de celebrar este lanzamiento, Alejandro Sanz ha querido retar a todos sus seguidores, a través de su cuenta oficial de Instagram, a participar en lo que él ha llamado «el brindis más multitudinario de la historia».
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