
Este acceso alternativo a la universidad no responde a ningún tipo de privilegio derivado de su condición como hija de los reyes Felipe y Letizia. Se trata de un procedimiento totalmente legal y abierto a cualquier estudiante que haya cursado el Bachillerato Internacional. En estos casos, los resultados académicos son evaluados y homologados por la UNED (Universidad Nacional de Educación a Distancia), que convierte las notas obtenidas en una calificación equivalente a la del sistema español. De esta forma, Sofía podrá acceder a una universidad española sin necesidad de pasar por la EBAU, siempre y cuando su nota homologada sea suficiente para la carrera que elija.
No obstante, existe la posibilidad de que la infanta decida presentarse a la fase voluntaria de la Selectividad para subir nota y poder acceder a titulaciones con una nota de corte más elevada. Pero, en su caso, no es un requisito obligatorio.
Aunque aún no se ha confirmado de forma oficial cuál será su elección académica, todo apunta a que continuará sus estudios universitarios en España. La Casa Real mantiene la discreción habitual en estos temas, pero los indicios apuntan a que la hija menor de los reyes iniciará una carrera en septiembre. Según ha comentado la periodista Pilar Eyre en su canal de YouTube, Sofía podría tener una vocación relacionada con las ciencias de la comunicación, aunque no hay confirmación oficial al respecto.
Lo que sí es seguro es que la infanta ya disfruta de unas merecidas vacaciones tras dos intensos años en el internado galés. En los próximos meses podría dejarse ver en actos institucionales como la llegada del buque escuela Elcano a Marín o en sus tradicionales vacaciones familiares en Palma de Mallorca.
MÁS SOBRE: