¿Alguna vez has sentido que tu pareja te cuenta todo, absolutamente todo, pero cuando tú necesitas apoyo emocional… cric-cric? Bienvenida al mundo del mankeeping’, ese trabajo invisible que muchas mujeres hacen sin saberlo y que no aparece en ningún contrato, pero sí en todas las discusiones de pareja.
Alejandra García lo vivió en carne propia durante una década, una historia que recogía El País. Su relación con Carlos parecía normal… hasta que se dio cuenta de que, más que pareja, era su psicóloga, su cheerleader y su secretaria personal. «No podía contarle mis problemas porque o no los entendía o luego me los echaba en cara cuando discutíamos«, confiesa a este medio. «Te sientes agotada, sobrepasada de que todo recaiga en ti y eso conlleva desgastes en la relación y, en mi caso, la ruptura«, añade.
“El mankeeping es el trabajo emocional que realizan las mujeres para compensar la falta de redes sociales de los hombres y reducir su aislamiento”, explica Angelica Ferrara, psicóloga social y coautora del estudio que dio nombre al fenómeno. En otras palabras: cuando él no tiene amigos con los que hablar, tú te conviertes en su red de apoyo emocional… completa.
Este concepto es una evolución del ‘kinkeeping’, acuñado en 1987 por la socióloga Carolyn Rosenthal, que se refería al trabajo invisible que hacen las mujeres para mantener la armonía familiar. El ‘mankeeping’ traslada esa carga al terreno de las relaciones de pareja, y lo hace con tres pilares fundamentales:
La psicóloga y catedrática Ana G. Méndez advierte que este patrón frecuente genera consecuencias psicológicas graves: «Las mujeres que cargan con esta responsabilidad experimentan fatiga emocional y mental, resentimiento hacia la pareja y un riesgo elevado de burnout. Muchas veces se sienten ansiosas, deprimidas y con la sensación de que todo depende de ellas«.
Aunque cabe destacar que este fenómeno no se limita tan solo a las relaciones de pareja. Como señala la psicóloga Vivián Rodríguez del Toro, «es la tendencia cultural de que las mujeres se sientan responsables de los hombres a su alrededor: hermanos, padres, esposos e incluso hijos adultos«.
Y es que la narrativa histórica y religiosa ha reforzado esta idea de la mujer abnegada, mientras que los hombres reciben un trato más permisivo.
En redes sociales como TikTok, el término ha ganado popularidad, permitiendo a muchas mujeres identificar y verbalizar dinámicas que antes eran invisibles.
Para enfrentar el ‘mankeeping’, la psicóloga Zayana Figueroa Montero recomienda establecer límites, fomentar la reciprocidad y practicar el «dejar de hacer», permitiendo que los hombres asuman responsabilidades: «En una relación debe haber reciprocidad y balance. No se trata de que una persona cargue al otro en todos los aspectos, sino de construir un espacio donde ambos puedan sostenerse emocionalmente«.
También cabe destacar que el ‘mankeeping‘ no es una teoría universal, y en algunos casos los roles se invierten. Pero su visibilización permite abrir un diálogo necesario sobre el reparto del trabajo emocional y la urgencia de construir vínculos más equitativos.
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