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El truco alemán que te salvará el verano: cómo enfriar tu casa con una simple botella de agua

Una gran alternativa para aquellos que no tienen aire acondicionado

Muchos son los que disfrutan del verano. Es época de vacaciones y las numerosas horas de sol invitan a hacer numerosos planes. Además, las altas temperaturas incitan a escaparse a la piscina o a la playa para refrescarse. No obstante, para aquellos que no tengan esa oportunidad el verano puede hacerse algo tedioso. 

Y es que en plena ola de calor, con temperaturas que superan los 40 grados en muchas regiones de nuestro país, un sencillo truco casero procedente de Alemania se ha convertido en la solución estrella para combatir el calor sin recurrir al aire acondicionado. Tan solo necesitas una botella de agua y un ventilador.

Y es que el aire acondicionado, además de que muchos no disponen de uno, puede dar grandes sustos en la factura de la luz si se usa constantemente a diario. Por eso esta alternativa viral ha conquistado a muchos usuarios en redes sociales.

El método consiste en llenar una botella de plástico de 1,5 o 2 litros de agua y llevarla al congelador hasta que su interior se solidifique por completo. Una vez congelada, se sitúa frente a un ventilador, de modo que el aire que pasa por el hielo se enfría antes de circular por la habitación.

El truco que puede salvarte el verano: combate el calor de manera sencilla

La eficacia del truco se basa en un fenómeno físico simple: el hielo, al derretirse, absorbe calor del entorno, lo que reduce la temperatura del aire. Este efecto, combinado con la circulación del ventilador, hará que se genere una sensación térmica más fresca, similar a la de un aire acondicionado pero sin su consumo eléctrico adicional. 

Si quieres un plus, coloca la botella de aire en un lugar elevado, ya que el aire frío, más denso, tiende a descender, distribuyéndose de forma más eficiente por la estancia.

Una solución económica y, sobre todo, sostenible. Y es que el uso de aire acondicionado en verano puede representar hasta un 30% del consumo eléctrico en estas fechas. Además, su bajo coste lo convierte en una opción accesible para todos los hogares.

Un hecho que demuestra que a veces las soluciones más simples pueden ser también las más ingeniosas. Y es que frente a las altas temperaturas del verano, cualquier ayuda es bienvenida.

Y tú, ¿lo pondrás a prueba?