Vanesa Martín se sincera sobre la vorágine emocional a la que ha tenido que hacer frente: «Una parte de mí no fluía»
Tras unos meses de muchos cambios
Pero ha sido un camino tedioso, y es que en los últimos meses ha tenido que hacer frente a numerosos cambios en todo lo que respecta a su carrera musical, desde un cambio de discográfica pasando de Warner a Universal, sin dejar de recordar a todo el equipo humano de la etapa anterior, a quien manda unas bonitas palabras en la dedicatoria de su recién estrenado disco, hasta un sentimiento de «asfixia» por la necesidad de probar caminos musicales diferentes, algo sobre lo que ha querido ahondar en unas recientes declaraciones.
La catarsis profesional de Vanesa Martín
La malagueña ha pasado por diversos medios de comunicación para dar a conocer ‘Casa mía’, uno de los proyectos más ambiciosos de su carrera, y ha sido en ‘El Mundo’ donde se ha confesado por todo lo que le ha tocado vivir estos últimos meses, y entre muchas otras cosas ha querido hablar sobre el ritmo vertiginoso de producción al que los propios artistas se someten en algunas ocasiones: «¡Es que parecemos panaderos en vez de músicos! Es increíble porque no te da tiempo de madurar. De hecho, este disco ha salido así porque el año pasado yo le pedí a mi equipo que necesitaba parar. (…) Sentí que tenía que producir y producir y estar pendiente del algoritmo. Soy una persona que no para escribir, pero necesito reposar las canciones», ha sentenciado.
Además, Vanesa Martín ha querido añadir que a raíz de tanto cambio tuvo que parar en seco y pensar: «Me sentí vacía porque también cambié de gerente y de discográfica. Y empecé a pensar que se me estaba yendo la cabeza con tanto cambio. Y cuando empieza a ordenarse todo, comienza a aparecer ese renacer, esa conexión con tu raíz, esa identidad»; unas palabras que con perspectiva se entienden de una manera diferente.
En toda esta vorágine también ha cambiado de músicos, y por supuesto ha querido recordar a su antigua banda, con quienes ha establecido una relación de amistad que va más allá de lo profesional: «Yo me atragantaba, llamaba y colgaba. He sido siempre muy honesta con ellos y he dado siempre lo mejor de mí. Siempre hago familia con todos mis equipos y se lo digo: «Yo me puedo ir contigo de fiesta, pero si mañana a las 9:00 tenemos que trabajar, soy la tía más seria del mundo». Entonces no tolero que no lo sean conmigo. Les llamé y les dije que les adoraba, pero que necesitaba explorar nuevos caminos: «Lo necesito porque me estoy asfixiando». Y ellos lo sabían. Ellos veían que en los directos había una parte de mí que no estaba fluyendo al 100%», confirma.
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