Con el avance de las tecnologías las grandes compañías buscan combatir a los ciberdelincuentes con medidas de seguridad que protejan los datos de los usuarios, pero a veces estos logran traspasar todas esas medidas y terminar cumpliendo su gran objetivo: sacarle los cuartos a sus víctimas.
Hace un año Aleksejs Kuprins, experto en ciberseguridad, descubrió un malware en cerca de 30 aplicaciones disponibles en la Play Store de Android. Un malware es un programa que intencionadamente lleva a cabo acciones dañinas en los sistemas informáticos, normalmente sin que usuario tenga conocimiento de ello.
Este malware recibió el nombre de Joker y se informó que afectaba a varias aplicaciones disponibles entre las ofertas de descarga de la Play Store. Aunque se lucha contra el mismo, siempre aparecen nuevos servicios que pueden tener ocultar muy bien el malware en ellos.
Unos días atrás, Zscaler, una empresa de ciberseguridad, anunció la presencia del mismo en hasta 17 aplicaciones novedosas. Se trata de aplicaciones que en su mayoría están disponibles en todo el mundo y que han sido descargadas en hasta 120.000 dispositivos.
Google ya ha llevado a cabo la eliminación de las mismas de su tienda y, por si fuera poco, ha puesto en funcionamiento el servicio Play Protect para que deshabilitarlas de los dispositivos que las han descargado y así evitar que sigan infectando a nuevos contactos. No obstante, para asegurar una completa protección frente al Joker recomienza desinstalarlas del dispositivo lo más pronto posible.
Te dejamos la lista de las 17 aplicaciones señaladas para que compruebes si la tienes en tu teléfono:
– All Good PDF Scanner
– Mint Leaf Message-Your Private Message
– Unique Keyboard – Fancy Fonts & Free Emoticons
– Tangram App Lock
– Direct Messenger
– Private SMS
– One Sentence Translator – Multifunctional Translator
Según ha informado el investigador Viral Gandhi y ha recogido la Cadena Ser, los ciberdelincuentes se sirven de este malware para obtener los datos personales de sus víctimas, así como su dinero.
Todo ello a través de las aplicaciones por las cuales pueden acceder a la lista de contactos, a los SMS o a datos bancarios que al mismo tiempo utilizan para sacar dinero o suscribir a sus víctimas a servicios de pago sin que estas se enteren. ¡Que no te las den con queso!
