El melón y la sandía son las frutas por excelencia del verano y es que a todos les gustan. Seas más de una o de la otra son piezas de fruta imposible de rechazar cuando tienes hambre, calor y sed.
El verano es el tiempo de las ensaladas. No hay nada como combinar todo lo que tienes en la nevera para conseguir una comida rápida y fácil. A veces nos quedamos sin ideas, pero es muy fácil hacer una ensalada completa con pocos ingredientes. Se nos olvida que la fruta también puede ser un primero. Al igual que combinamos el melón con jamón, la sandía puede ser la base perfecta de una ensalada. Solo hace falta partirla en cuadrados más o menos de tamaño mediano, echar taquitos de queso fresco a trozos más pequeños. Se le puede añadir semillas de pipas y taquitos de calabaza. A la receta no haría falta nada más que echarle orégano y especias al gusto para disfrutar de un acompañante de primera.
Los batidos, smoothies, o zumos de frutas están en su punto más alto. Es una forma diferente de comer la fruta y disfrutar de todas sus propiedades. Lo mejor de estas opciones es que son refrescantes y eso en verano nunca está de más. La combinación perfecta es de sandía y fresas. Trocéalas, mézclalas y tritúralas junto a unos cubitos de hielo. Dependiendo si te gusta más la textura de un batido puedes añadir un poco de leche. Si prefieres los zumos añade un poco de agua y ¡listo!
¿A quién no le gusta un buen gazpacho? Incluso un salmorejo acompañado de huevo y atún es una comida perfecta en esta época del año. Para crear este plato principal se necesita mezclar tomate, sandía, cebolla, pimiento rojo, ajo, aceite de oliva, vinagre, sal, y pan. Una vez hecho el propio salmorejo, se puede añadir algún topin al gusto por encima. Algunas ideas podrían ser trozos de kiwi, de queso…
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