Lola Índigo

Lola Índigo denuncia el machismo que existe en el mundo del baile: «No me da la gana»

Noelia Bertol

«Qué valiente. Demuestras estando aquí que para el baile no hay edad«, expresaba Miguel Ángel Muñoz en su valoración a la bailarina Sara del Pino (de 42 años) en The Dancer, el programa que La 1 de TVE emite los lunes.

Unas palabras con la que muchos estaban de acuerdo. Para bailar no hay edad. Sin embargo, sí que parece haberla cuando se trata de tener un hueco en la industria, sobre todo si se trata de una mujer.

Mimi Doblas, más conocida como Lola Índigo (que también forma parte del jurado), lamentaba esta fecha de caducidad en el mundo del baile que se presenta antes en mujeres que en hombres. «Ya tienes toda mi admiración solo por lo difícil que es ser mujer en la industria del entretenimiento«, expresaba.


Las palabras de Lola Índigo, muy aplaudidas

 

La discriminación por edad en mujeres dentro del mundo del baile es una forma más en la que se manifiesta el machismo presente en nuestra sociedad. La también bailarina Lola Índigo, de 29 años de edad, lamenta que ocurra esto en su mundo y se mostró muy crítica al respecto.

«A mí no me da la gana que cuando llegue a una edad me digan que no puedo hacer algo porque los tíos están ahí trabajando hasta los y pico. Sí, ellos pasan castings y están hasta mucha más avanzada edad que nosotras«, denunciaba la granadina, alabando el potencial que demostró la concursante.

Sara del Pino no es un rostro desconocido en el mundo del baile. Esta ha participado en formatos tan icónicos de la televisión como el Grand Prix o Telepasión y en alguna ocasión compartió trabajo tanto con Mimi como con Rafa Méndez, también sentado en la mesa del jurado.

Lola Índigo no pudo dejar de destacar el talento de su compañera y aprovechar este espacio que es la televisión pública para denunciar un hecho que se vive en la profesión con mucha frecuencia. Muchos son los que han aplaudido las palabras de la triunfita y el hecho de que utilice su altavoz para visibilizar una dura realidad.