Miguel Bose corta en seco la entrevista de Cristina Pardo huyendo

"Se ha acabado el tiempo"

Alvi Ferrante

Cristina Pardo, periodista valiente donde las haya, se reunía con Miguel Bosé con motivo de la publicación de las memorias del cantante.

Una conversación llena de momentos incómodos que pasarán al currículum de la televisiva como un mérito al toreo. Supo llevar con maestría las espantadas del artista durante un buen rato. Sin embargo, la cuerda terminaba por romperse de la peor manera: con un Miguel Bosé abandonando el lugar y dando las preguntas por terminadas.


Cristina Pardo, en su estilo más desafiante

Todo comenzaba con un pequeño tira y afloja sobre la voz del artista. Pardo preguntaba así a Miguel Bosé: «¿Te ves con fuerza? Porque a Jordi Évole le contaste que habías tenido problemas con la voz». Lo que no esperábamos era la respuesta que el hijo de Dominguín daría: «¿Jordi quién? ¿Quién es?»

De esta forma el de Amante Bandido renegaba hasta tres veces de uno de sus mejores amigos. Entonces, era el cantante quien lanzaba el guante a la presentadora de Más Vale Tarde: ¿Cómo me ves la voz ahora?  Pardo respondía con la boca pequeña: «Creo que mejor que en el programa de Évole»

El hijo de Lucía Bosé no podía dar crédito a las palabras de su compañera de conversación: «¿Solo crees? ¿Cómo oyes la voz? ¿Mejor? ¿No bien? Pero serás… Estás sorda. No quieres dar tu brazo a torcer. No dan su brazo a torcer ni así los maten».

Miguel Bosé abandona con la sombra del covid asomando

Cristina Pardo asomaba tímidamente la patita preguntando sobre política al cantante quien aseguraba que para él había sido: «el gran error de mi vida. No creo en la política».

«Voy a terminar y no te he preguntado por el coronavirus. Ya que te tengo aquí…». Ya entrados en materia y con la entrevista a puntito de finalizar, la presentadora sacaba el gran tema prohibido: el coronavirus. La táctica de huida fue muy sutil: sin grandes enfados, ni aspavientos que evidenciaran su desagrado.

«De eso no hablo en el libro…» el altísimo Bosé se levantaba del asiento dando por terminada la ronda de preguntas. El equipo del artista informaba a la periodista amablemente de que su tiempo había terminado.

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