Acabamos de dejar atrás los días de playa, aperitivitos en el chiringuito y helados a media tarde. No tenemos duda de que te lo has pasado fenomenal y has vuelto con un montón de recuerdos y buenas experiencias pero en algunos casos también con algún kilillo de más. No te agobies, la buena noticia es que puedes dejarlos casi tan fácil como los has cogido haciendo algunos cambios sencillos en tu día a día. Di adiós a los kilos «extra» del verano con estos sencillos cambios.
El primer cambio que debes hacer está relacionado con tu desayuno y es tan sencillo como incluir la proteína en el mismo, el motivo es como explican desde www.welife.es, que » la proteína ayuda a reducir la sensación de hambre y es saciante, por lo que te va a ayudar a no picotear sin control durante la mañana….Además, la proteína ayuda a acelerar el metabolismo, evita el almacenamiento de grasas y ayuda a mantener estables los niveles de glucosa en sangre.»
Puedes desayunar una tortilla, un yogur griego con arándanos, unos copos de avena o una tostada de pan de centeno con aguacate y salmón ahumado y verás como no tienes hambre en toda la mañana.
El siguiente cambio que debes hacer en tu dieta es olvidarte de los alimentos ultraprocesados, ya que no son nada saludables. Intenta reducir el azúcar de tu dieta y esto no solo incluye el que te echas en el café, hay azúcar oculto en muchos alimentos, así que procura leer bien las etiquetas, es fácil que el jamón serrano, el tomate frito, e incluso los guisantes lleven azúcar. Si tienes antojo de dulce pásate a las infusiones, un yogur ante de dormir o un vaso de leche desnatada evitará que caigas en la tentación del dulce.
Procura moverte todo lo que puedas, no hace falta que te des una paliza en el gimnasio. Caminar ligero 30 minutos al día es suficiente para notar resultados en poco tiempo. Prueba a hacer cosas que te gusten como nadar, yoga o incluso con algo tan sencillo como subir escaleras en lugar de coger el ascensor.
Y por último intenta dormir bien, si no lo haces estarás alterando,» la producción de hormonas que regulan el hambre y la saciedad, leptina y grelina. Estas hormonas desempeñan un papel fundamental en el metabolismo. La falta de sueño no solo aumentaría el apetito y alteraría nuestra percepción de la saciedad.»
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