Los engaños son algo muy doloroso por el que algunas personas pasan. Hay quien lo afronta de forma vengativa, pero también hay quien lo hace con dolor y bloqueado por la situación.
Joana hace unos años se fue a París y conoció a un chico. A partir de ahí empezó una relación con él. Cuando se casaron, se mudó con ella y su madre. Poco después empezó a serle infiel en repetidas ocasiones. Ella se enteró a través de su móvil, y además, las chicas que llevaba a casa olvidaban algunas de sus cosas. Para aclararse, Joana y su madre se fueron unos días a su pueblo, pero cuando volvieron no estaban en casa ni él, ni los muebles. Vendió desde objetos de valor, hasta sentimentales para ellas. Ahora Joana no logra superar lo que pasó.