Laura Madrueño presenta a su marido, fotógrafo, arquitecto… y su gran apoyo

Se conocieron hace siete años por amigos comunes y se casaron el año pasado

Ana Más

Hasta ahora Laura Madrueño presentaba El tiempo en Telecinco, y decimos hasta ahora porque desde esta semana la podemos ver presentando la nueva edición de Supervivientes desde Honduras. La periodista afronta un nuevo reto en el que seguro ha contado con el apoyo de su marido, Álvaro Puerto con quién se casó el pasado mes de junio en una boda que contó con dos celebraciones, una en un barco en Formentera, ya que a Laura le encanta el mar, y otra a la que pudo asistir más gente, en su casa.

Laura se marchó a Honduras a finales de enero pero antes de hacerlo estrenó un videopodcast en Mtmad, «Huracán Madrueño», cuyo primer capítulo ha tenido como protagonista precisamente a su marido, al que entrevistaba para contar algunos detalles de su vida juntos.

La pareja se conoció las navidades de hace siete años por amigos comunes. Entonces Álvaro llevaba el pelo corto y no tenía barba, un look muy distinto al de ahora, que luce melena larga y rizada, además de barba. Su mujer bromeando lo compara con el actor Jared Leto.


La vida de Laura Madreño en plena naturaleza


Puerto es fotógrafo y arquitecto, en su perfil de Instagram, @alvaropuertophotography, se puede ver parte de su trabajo como fotógrafo, además de muchas fotos personales como las de su boda. Eso sí, todas con un denominador común: Laura Madrueño es la protagonista de muchas de ellas.

Algo que deja claro también en sus fotografías es su amor por la naturaleza, una afición que ambos comparten y que han convertido prácticamente en una forma de vida. Viven en medio de la naturaleza en una casa alimentada por energía solar, tienen un huerto, gallinas y a su perrita que acaba de tener cachorritos. Un modo de vida que, como Laura confesaba en su podcast, le iba a costar dejar.

Aunque esta no es la primera vez que la pareja se separa durante meses. De hecho, lo hicieron nada más conocerse por trabajo. Álvaro se fue a Kenia y Laura a México. «Fundimos el Skype. Antes de que existiera el teletrabajo casi, nosotros montamos la ‘telepareja'», bromeaba Puerto, que ahora le ha prometido a su mujer pasarse por Honduras.