De generación en generación pasan muchas cosas: las modas, las recetas típicas de nuestros antepasados, las costumbres de los pueblos, las tradiciones y también los refranes. Se trata de frases que suelen tener rimas asonantes o consonantes y que se usan para entender conceptos o para hacer una explicación algo más divertida.
Si por algo se caracterizan es por los años que pueden tener, llegando a venir de generaciones pasadas, pero calando en nuestros días. A continuación, hemos hecho una recapitulación de los 100 mejores dichos para que uno de los mejores tesoros de nuestra lengua no se pierdan:
Los refranes populares españoles
Esta es la lista de algunas de las frases hechas y dichos más sonados en nuestro país y su significado, según recoge el Centro Virtual de Cervantes (CVC). ¿Te suena alguno?:
«Dime de qué presumes y te diré de qué careces»: presumir o alardear de algún atributo que no se tiene.
«Cuando el grajo vuela bajo, hace un frío del carajo»: se usa cuando hace mal tiempo, ya que el vuelo bajo de algunas aves indica una bajada de termómetros.
«Marzo ventoso y abril lluvioso sacan a mayo florido y hermoso»: señala las predicciones de tiempo meteorológico para obtener unas buenas cosechas en el futuro.
«Tres Jueves hay en el año que relucen más que el Sol»: estos son el Jueves Santo, Corpus Christi y el Día de la Ascensión.
«Cuando hay frutas en la huerta, hay amigos en la puerta»: hace alusión a las amistades interesadas.
«A cada cerdo le llega su San Martín»: antes o después, habrá castigo ante un mal comportamiento.
«En boca cerrada no entran moscas»: es mejor callar si lo que vas a decir no mejora el silencio.
«Obras son amores y no buenas razones»: el amor no es solo de palabra, también hay que demostrarlo con hechos.
«Ojos que no ven, corazón que no siente»: a veces es mejor ignorar para no herir sentimientos
«Cree el ladrón que todos son de su condición»: ante las malas acciones o comportamientos, creemos que el resto piensa igual.
«Cuando el río suena, agua lleva»: viene a decir que cualquier rumor tiene algún fundamento.
«Por la boca muere el pez»: si hablas demasiado, puede haber consecuencias. Como el pez con el anzuelo.
«Las palabras se las lleva el viento»: ante una promesa o compromiso, mejor por escrito.
«Del dicho al hecho, hay mucho trecho»: una cosa es lo que te digan o prometan y otra, lo que finalmente cumplan.
«Dios aprieta pero no ahorca»: mantener la esperanza y conformidad en la fe, pese a las angustias.
«Donde fueres, haz lo que vieres»: consejo a una persona para que se adapte a las culturas de otro lugar.
«Quien mucho abarca, poco aprieta»: si ansías demasiado, al final puedes acabar con menos de lo que esperabas.
«Hombre precavido vale por dos»: prevenir, ser cauto para no caer en el engaño.
«Al que madruga, Dios lo ayuda»: quien trabaja y se esfuerza, obtiene su recompensa.
«Más vale estar solo que mal acompañado»: es mejor opción la soledad antes que estar con compañías inadecuadas.
«Más vale prevenir que lamentar»: para evitar problemas, mejor es ser precavido.
«Se dice el pecado, pero no el pecador»: cuando a alguien no le interesa o no puede revelar la identidad de alguien que ha cometido alguna ‘fechoría’.
«Mal de muchos, consuelo de tontos»: se refiere que cuando algo malo pasa, no es más fácil de afrontar si le pasa a más personas
«En trece y martes, ni te cases ni te embarques»: hace alusión a que durante estos días es mejor no tentar a la suerte.
«Dios aprieta, pero no ahorca»: por muy agobiadx que estés por las cosas que tienes que hacer, nada es para tanto.
Dichos graciosos
«A barriga llena, corazón contento»: cuando tu estómago está saciado, tú te sientes feliz y satisfecho.
«¿Dónde va Vicente? Donde va la gente»: crítica a quienes imitan el comportamiento de los demás.
«Sarna con gusto no pica»: si persigues y consigues algo que realmente deseas, no te importa las consecuencias.
«Dios los cría y ellos se juntan»: ironía sobre las amistades que se juntan y comparten un mismo patrón (comportamiento, gustos…).
«El que espera desespera»: el sufrimiento de la incertidumbre.
«Escoba nueva barre bien»: todo lo nuevo y sin usar es mejor.
«Si te he visto, no me acuerdo»: se le dice a una persona ingrata que no muestra reconocimiento o gratitud a quien ha hecho algo por él/ella.
«El muerto al pozo y el vivo al gozo»: cuando la familia de un difunto se queda con la herencia o posesiones del fallecido.
«Loro viejo no aprende a hablar»: la creencia de que cuando uno se hace mayor, ya es tarde para ampliar el conocimiento sobre algo.
«Contigo, pan y cebolla»: querer de forma incondicional, similar al ‘ en la salud y en la enfermedad, en la riqueza y en la pobreza’.
«Caras vemos, corazones no sabemos»: no debemos juzgar a alguien solo por su apariencia.
«Cuando el gato está ausente, los ratones se divierten»: es decir, que cuando la persona autoritaria está fuera, comienza la diversión.
«Oveja que bala, bocado que pierde»: hablar de más puede jugarnos una mala pasada.
«El muerto y el invitado a los tres días apestan»: un huésped puede convertirse en un estorbo al cabo de un tiempo.
«Vísteme despacio, que tengo prisa»: las prisas no son buenas.
«Unos tienen la fama y otros cardan la lana»: se usa cuando alguien se ha llevado los beneficios de algo que no se ha trabajado.
«Por un perro que maté, mataperros me llamaron»: basta con haber hecho una cosa mala para ganarse una mala reputación.
«Jaula nueva, pájaro muerto»: a veces, los cambios resultan ser a peor.
«Guerra avisada no mata soldados»: si adviertes de los riesgos, puedes evitar peligros.
«A caballo regalado no le mires el dentado»: aceptar y agradecer lo regalado por cortesía.
«Una golondrina no hace verano»: no se puede generalizar ante un solo caso o hecho.
«El pez grande se come al chico»: cuando alguien abusa de su fuerza o poder.
«Mucho donaire, causa desaire»: se refiere a que cuando hay un exceso de desenvoltura, a veces causa rechazo.
«Ande yo caliente, ríase la gente»: significa que mientras uno esté abrigado, da igual lo que opine la gente.
«Eres más largo que un día sin pan»: se refiere a que algo es demasiado largo.
Refranes para niños
«La intención es lo que cuenta»: concesión o resignación positiva ante algo que no has podido conseguir.
«La música amansa las fieras»: el efecto tranquilizador de la música sobre los animales (o humanos) más malhumorados.
«Quien se pica, ajos come»: cuando alguien interviene en una conversación, revelando que se siente aludido.
«Hoy por ti, mañana por mí»: un favor por otro favor, el ‘quid pro quo’ de toda la vida.
«Quien tiene boca se equivoca»: somos humanos y, por tanto, tenemos derecho a equivocarnos.
«Perro ladrador, poco mordedor»: a veces, la agresividad es solo fachada.
«A otro perro con ese hueso»: dicho de otra manera; que no te tomen por tonto/a.
«Poco a poco se anda lejos»: con tiempo y esfuerzo también se cumplen objetivos.
«Querer es poder»: quien quiere algo con mucho empeño, siempre encuentra un modo de conseguirlo.
«La fe mueve montañas»: con confianza, es posible realizar lo que te propongas.
«A las diez en la cama estés y mejor antes que después»: la mejor forma de hacer que los niños se vayan pronto a dormir.
«Lo que abunda no daña»: nunca perjudican las cosas útiles.
«No hay mal que por bien no venga»: siempre hay que buscar el lado positivo ante las adversidades.
«La buena madre no dice: ‘¿quieres?'»: sino que te da cuanto tiene.
«Hijo eres y padre serás; cual hicieres tal habrás»: cuida a tus padres como querrías que tus hijos te trataran a ti.
«Amor de madre, que todo lo demás es aire»: no haya nada como el amor de una madre, dicen.
«Barriga vacía, no tiene alegría»: si tienes hambre, no puedes estar feliz.
«Preguntando se llega a Roma»: ante cualquier duda, lo mejor es preguntar para saber.
«No es oro todo lo que reluce»: no todo lo que parece bueno lo es realmente.
«No hay atajo sin trabajo»: sin esfuerzos no se llega a conseguir lo que se quiere.
«A la tercera va la vencida»: anima a los niños a seguir intentándolo pese al fracaso.
«Lo barato sale caro»: cuando compras algo de mala calidad y poco duradero, por ahorrar, y luego con el tiempo lo tienes que volver a comprar.
«Más vale maña que fuerza»: se refiere a que la inteligencia es superior a la fuerza bruta.
«Quien duerme mucho, poco aprende»: se usa para animar a que una persona deje de ser holgazana y se levante a ser productivo.
«Más vale ser cabeza de ratón que cola de león»: mejor ser el primero y mandar en una comunidad pequeña, que ser el último en otra mayor.
Dichos cortos
«A bien obrar, bien pagar»: es decir, quien actúa con honradez o hace lo que debe, la vida le recompensa
«A buenas horas, mangas verdes»: cuando la solución llega demasiado tarde.
«A lo hecho, pecho»: afrontar las consecuencias de nuestros actos.
«Tanto tienes, tanto vales»: apunta a que a las personas se las trata según el dinero que tengan.
«Al mal tiempo, buena cara»: ante las adversidades y problemas, actitud positiva.
«Cada loco con su tema»: cada uno tiene sus gustos, preferencias o visiones.
«De tal palo, tal astilla»: costumbres y carácter que pasan de padres o madres a hijos o hijas.
«El que la hace, la paga»: responsabilizarse de sus actos.
«Dinero llama dinero»: da a entender todo lo que se consigue (y se mueve) con muchas cifras en el bolsillo.
«El que calla otorga»: quien no dice nada, da a entender que no está en desacuerdo con lo que se habla.
«Amor con hambre no dura»: se le dice a quien está enamorado de alguien que no tiene los suficientes recursos para compartir una vida con otra persona.
«Mucho ruido y pocas nueces»: cuando se le da (o se da uno mismo) una importancia a algo (o alguien) que realmente no la tiene.
«Un clavo saca otro clavo»: popularmente aplicado a quien ha sufrido un desengaño amoroso y tiene que olvidarse de esa persona con otra.
«No hay quinto malo»: viene a decir que lo mejor de una situación ardua, puede venir al final.
«Quien tiene din, tiene don»: a quien tiene dinero se le muestra respeto.
«Tanto tienes, tanto vales»: la sociedad trata a las personas en función de su nivel de riqueza.
«Nadie es profeta en su tierra»: de origen bíblico, aplicado a las personas que tienen que dejar su hogar para labrarse una buena reputación.
«Quien ríe el último, ríe mejor»: dicho de otra forma; no cantes victoria antes de tiempo.
«El hábito no hace al monje»: no juzgar por su apariencia física.
«El mundo es un pañuelo»: se usa cuando encuentras a alguien conocido en el lugar que menos esperabas.
«Zapatero a sus zapatos»: insta a que cada uno se ocupe de lo suyo y de lo que sabe.
«A rey muerto, rey puesto»: habla de la rapidez con la que se ocupan los puestos.
«El poeta nace, no se hace»: hace referencia a que algunas habilidades no se practican, sino que se llevan en la sangre.
«Haz bien y no mires a quien»: se refiere a ser buenas personas con todo el mundo.
«El que se excusa, se acusa»: cuando alguien se disculpa a medias por haber hecho algo mal.
