La fiebre por las freidoras de aire son ya una realidad. Es raro el que a estas alturas se ha resistido a tener una de ellas en su casa. Y es que poco o nada tienen que ver con las clásicas freidoras que requieren litros y litros de aceite para cumplir con su metido de cocinado.
Estos nuevos electrodomésticos han generado un gran club de fans en los últimos tiempos y es que son infinidad las recetas que se pueden hacer en ellas, desde unas simples patatas fritas hasta unos cruasanes rellenos que poco o nada tendrán que envidiar a ninguna pastelería.
Si eres de los que todavía no dispone de este aparato en casa y estás pensando en adquirirlo, en Cadena Dial nos hemos hecho eco de las ventajas e inconvenientes sobre cocinar con freidoras sin aceite que la Organización de Consumidores (OCU) ha notificado en su portal web para que te ayude a tomar una decisión.
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¿Cómo funcionan las freidoras de aire?
Las freidoras de aire son electrodomésticos que cumplen una función similar a la de un horno generando calor y distribuyéndolo por todo el interior con la ayuda de un ventilador. Esto hace que el alimento en cuestión se cocine de forma uniforme y perdiendo un poco de agua. Todos estos alicientes han provocado que sea tan popular entre los consumidores.
Para entender su uso es importante que sepas de antemano, que el tiempo de cocinado no es el mismo que el de una freidora convencional, ya que al no llevar aceite requerirá de mayor tiempo. En cualquier caso, aquí os dejamos los pros y los contras de cocinar los alimentos con las freidoras de aceite según la OCU.
Ventajas de las freidoras de aire
Estas son los pros de usar las freidoras de aire para cocinar todos y cada uno de tus alimentos:
Alimentos menos grasos y con menos calorías. El alimento frito siempre lleva determinada cantidad de grasa, mientras que la freidora de aire reduce su porcentaje y, por ende, las calorías del mismo.
Menos consumo energético. Contribuye al ahorro ya que el utilizarlo dos horas supone un gasto de 1,80 euros al mes frente a 2,8 del horno; 3,2 de la freidora de aceite tradicional y más de 4 euros si se utiliza una placa de inducción. Por lo que resulta más económico para los bolsillos.
Mejor opción de cocción para alimentos congelados. Los alimentos que ya están congelados cuentan con un cocinado previo, lo que significa que necesitarán poco aceite para su fritura, como los Nuggets o las barritas de merluza. Tendrás que colocarlos separados y con un pequeño chorro de aceite para que se hagan por todas las partes de forma uniforme.
Fácil y rápida limpieza. No es tan engorroso de limpiar si lo comparas con el horno o la freidora de aceite.
No se consiguen los mismos resultados. La textura o el sabor son muy diferentes a los que has estado acostumbrados. Ten en cuenta que en los rebozados caseros es difícil conseguir que la cocción quede en su punto.
Cocinado es lento. Al no llevar aceite, el tiempo del cocinado suele demorarse más que con el método tradicional, concretamente, unos 20 minutos por cada tanda.
Capacidad limitada. El espacio suele ser más pequeño, por ejemplo, que un horno. Por lo tanto, no es la opción más recomendable si vas a cocinar para muchas personas, ya que necesitarás hacer varias tandas.
En resumen, las freidoras de aire son una buena alternativa especialmente para aquellos que no consumen muchos fritos en sus dietas, ya que permiten hacer muchas comidas como prácticamente lo hace un horno o una freidora tradicional, pero de forma más económica y saludable.
