Ya ha comenzado la estación del año que acarrea la caída de las hojas y el descenso de la temperatura: el otoño, que se caracteriza por la llegada de la rutina habitual y las tardes en las que el sol se pone antes. Muchos de nuestros artistas, como Amaia Montero, Manuel Carrasco o Reik dedicaron una canción al último trimestre del año, para dejar por siempre en sus discografías un tema que recordase a este periodo. Hay una característica común a todas ellas y es que la nostalgia y la melancolía son su nota predominante, provablemente por el color grisáceo característicos de los días otoñales.
Es una de las canciones que conforman el álbum homónimo del grupo, que a su vez sirvió como su debut en la industria musical en 2005 con más de una decena de temas. En ella, hablan sobre el penúltimo mes del año, que se engloba en su totalidad en la estación otoñal, para cantarle al desamor con una historia en la que el protagonista echa de menos a la persona que se fue de su lado.
«Noviembre sin ti es sentir que la lluvia me dice llorando que todo acabo. Noviembre sin ti es pedirle a la luna que brille en la noche de mi corazón otra vez, otra vez. Quisiera decirte que quiero volver, tu nombre va escrito en mi piel, ya es de madrugada, te sigo esperando otra vez. Porque te extraño desde aquel Noviembre cuando soñamos juntos a querernos siempre. Me duele, este frio Noviembre cuando las hojas caen».
Fue uno de los sencillos principales de ‘Habla’, el disco que el onubense publicó en 2012 recogiendo algunos de sus temas más exitosos como ‘Esta vez no’, ‘Puedes ser libre’ o ‘Si miras a tu alrededor’. Con un ritmo muy pegadizo que pemanecerá en tu cabeza desde el momento en el que la escuches, Manuel canta por lo que pudo ser y no fue.
«Otoño octubre sin sol, hotel impaciente en mi habitación, no esperes me digo, espera por dios, aligera el paso que nunca llegó Me olvido te busco y un adiós me encuentro, escucho tus pasos porque los invento, creí que creyendo podría pasar, paso si que es cierto pero sin pasar».
El segundo disco de Amaia Montero, que se publicó bajo el título ‘2’, supuso su consagración en el panorama musical como solista, tras abandonar el grupo con el que comenzó en la industria discográfica, ‘La Oreja de Van Gogh’. Con una letra muy extensa, la guipuzcoana canta sobre la pérdida del sentimiento amoroso que una persona puede llegar a experimentar durante una relación sentimental, pero que en muchas ocasiones deja a la otra persona con un sentimiento totalmente opuesto.
«Hablándote de amor, mirándote a los ojos y fingiendo que ya no siento nada, que inventé mis propios cuentos y sabrás cómo olvidarme para hacerme recordar. Volver a casa siempre fue salvarme un poco, noviembre llega recordándome tus ojos, te echo de menos y hoy he roto mi condena, no existen dudas pero tú ya no me esperas».
Su disco ‘3000 noches con Marga’ también tuvo hueco para la estación del año que sucede al verano, y en esta canción, el artista se detiene a hablar sobre el color que caracteriza a los días otoñales, que en muchas ocasiones nos hacen recordar momentos pasados de nuestras vidas.
«Pasa el otoño en Madrid y el color ocre se funde a gris, vuelven recuerdos de inviernos pasados junto a ti. Sentado hoy frente al mar, nada perturba la paz, y ahora comparto contigo, nuestra verdad».
MÁS SOBRE:
© Sociedad Española de Radio Difusión, S.L.U
© Sociedad Española de Radiodifusión realiza una reserva expresa de las reproducciones y usos de las obras y otras prestaciones accesibles desde este sitio web a medios de lectura mecánica u otros medios que resulten adecuados a tal fin de conformidad con el artículo 67.3 del Real Decreto-ley 24/2021, de 2 de noviembre.