Qué es el recommerce, la tendencia de mercado de segunda mano por la que apuestan Zara, Ikea o Mango

El ahorro y el fomento de la sostenibilidad está entre las ventajas de este tipo de compra

Ana Más

El año pasado  el ‘recommerce’ generó más de 5.500 millones de euros en España, según datos de Milanuncios. El término también conocido como comercio inverso o comercio de segunda mano, « es el proceso de venta de productos usados ​​o el exceso de inventario a las empresas o los consumidores. Generalmente se refiere a la venta de artículos previamente usados ​​o de propiedad a través de tiendas online», explican desde el blog de la Universidad Europea.

A su vez desde 20Minutos explican que esta práctica «continúa en auge con previsión de crecer entre un 15% y un 20% anual a nivel global hasta 2026, según la consultora Boston Consulting Group» y esto ha hecho que las grandes marcas apuesten también por ello, incluyendo esta opción en sus tiendas, como han hecho ya Zara, Ikea y Apple.

La forma de hacerlo es entregando un cheque con dinero para gastar en sus tiendas, a aquellos clientes que entreguen productos ya usados y comprados con anterioridad en sus tiendas que después venderán en un «apartado especial dentro de sus páginas webs con descuentos que, en ocasiones, superan el 50%», explican desde el mismo medio.


Mayor ahorro y fomento de la sostenibilidad entre las ventajas del recommerce

Esto les beneficia porque además de saber que es ahí donde están los clientes, «consiguen crear una imagen de empresa sostenible preocupada por el planeta y este tipo de servicios puede provocar una mayor lealtad de los clientes a la marca«, cuenta Susana García profesora de EAE Business School en 20Minutos.

Y es que con esta fórmula las dos partes ganan:«El vendedor se beneficia de la confianza y reputación de la plataforma a través de la cual ofrece sus productos, y el comprador asume cierta garantía al hacerlo a través de ella», explica la experta. Además de la garantía que supone para el comprador, que asume que estando una marca detrás la compra, «se garantiza una mayor calidad de los productos».

Desde la Universidad Europea hablan de algunas otras ventajas de este tipo de compras:

  • Permite ahorrar, ya que los productos suelen ser más económicos que si fueran nuevos
  • Fomenta la sostenibilidad al reutilizar lo que ya existe y esto a su vez reduce la necesidad de producir productos nuevos, «se demandan menos materias primas, se consume menos energía y  se emite menos gases nocivos a la atmósfera», explican.
  • Reduce la producción de residuos
  • Impulsa una compra más responsable, ya que  el consumidor elige opciones más duraderas y de mayor calidad en la ropa que compra, para luego poder venderla y esto a su vez «fomenta el desarrollo de una economía circular sustentada en un consumo más consciente que se aleja del usar y tirar».

 

 

 

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