Tini, Aitana y Leiva

De Aitana a Leiva o Tini: un viaje musical que nos hace llegar hasta el cielo

Canciones que transforman lo intangible en emoción

Adriana Diez

El cielo. Ese lugar que siempre hemos imaginado como inalcanzable, ese espacio que parecía existir solo en sueños o en películas, algo intangible que nos recuerda que hay fronteras que parecen imposibles de cruzar. Sin embargo, la música de nuestros artistas favoritos nos demuestra que también podemos rozarlo y sentirlo de cerca.

Las canciones que nos hacen llegar hasta el cielo

Este año Aitana publicaba su disco Cuarto Azul, en el que se incluyen temas como Música en el cielo, el sencillo que dedica a su abuelo Antonio, a quien no pudo conocer ya que falleció de joven. Con sus versos, la joven plantea cómo es ese lugar al que van los que ya no están con nosotros y compara a su familiar con un ángel de la guarda que la cuida y la espera desde arriba.

Hace 6 años Leiva estrenaba En el espacio, que utiliza como metáfora ese lugar infinito para simbolizar la conexión entre dos almas que se encuentran en un «camino de estrellas», un concepto metafórico con el que quiere expresar esa localización donde no siempre es fácil coincidir. Es una declaración de amor en la que el madrileño imagina a la otra persona como quien da sentido a su existencia.

Por su parte, Tini, en su tema El cielo, utiliza la metáfora de «tocar el cielo» para describir esas ansias que a veces tenemos de encontrar el amor idílico, pero que a veces no sale como imaginamos y la persona que creíamos amar se convierte en una decepción: «Lo que pasó entre tú y yo, fue querer tocar el cielo, y el cielo se cayó».

En este caso, el firmamento representa lo perfecto, y poder alcanzarlo sería un signo de excelencia en nuestro ser.

Fito y Fitipaldis, con Cielo hermético, le da un sentido totalmente diferente, expresando en sus letras los límites autoimpuestos que nos impiden la libertad plena. Además, utiliza ese concepto de «cielo hermético» para simular cómo es estar atrapado en un lugar cerrado, sin cabida para el crecimiento personal.

Por último, Dani Fernández y la banda Siloé lanzaban en 2020 una colaboración llamada Súbeme al cielo, que expresa la necesidad de que un gran amor les traslade a un espacio donde las cosas van mucho mejor que en la tierra, y donde juntos pueden encontrar la felicidad:

Súbeme, súbeme al cielo
Pero déjame ahí
Súbeme, súbeme al cielo
Pero déjame ahí

¿No ves?
Que aquí las cosas ya no van tan bien
Que aquí las cosas ya no van…

Estos temas nos recuerdan que un mismo término puede tener diversos conceptos y significados que nos invitan a la reflexión.