
Una buena tarde de lluvia es perfecta para componer, recrearnos en un espacio tenue, en sus reflejos, escuchar el susurro de las gotas al caer y aprovechar lo que pasa detrás de la ventana para incluirlo en tu repertorio musical.
Pablo López o Amaral son algunos de nuestros artistas que se han inspirado en este fenómeno meteorológico con temas que nos invitan a la reflexión.
Con Lluvia en el cristal, Pablo López quiere enseñarnos que las batallas más duras a las que nos enfrentamos durante nuestra vida son fugaces, que pasan como el agua que vemos caer del cielo o por nuestros cristales y que, como las tormentas, todos los males terminan.
Amaral tomó como inspiración el fenómeno meteorológico para expresar sentimientos de dolor y tristeza. En su tema Lluvia, lo utiliza para pedir reencontrarse con aquellas personas que ha perdido o ha amado durante un tiempo.
En 1998 Fito Páez y Joaquín Sabina, interpretaban Llueve sobre mojado que coincide la expresión popular referida a las situaciones en las que los problemas se acumulan, haciendo que una realidad ya difícil se vuelva aún más complicada.
La canción aprovecha esta metáfora para abordar las decepciones y desilusiones con un tono poético.
23 años más tarde y bajo el mismo título, Aitana, Pablo Alborán y Álvaro de Luna lanzaban una colaboración con mucho ritmo donde abordaban el mismo tema: el de tropezar siempre con la misma piedra.
No podíamos acabar con este repertorio sin incluir uno de los temas más famosos de María Villalón, La lluvia, una en la que se acordaba del agua que caía de los tejados donde vivió un gran amor, rincones donde se refugiaba junto a su amado del temporal y comenzaba su bonita historia romántica, que desgraciadamente se convertía en un recuerdo.
Una serie de composiciones que sacan nuestro lado más reflexivo y que hacen que cualquiera quiera disfrutar de un cielo gris.
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