
Y aunque pueda parecer inofensivo, lo cierto es que la mezcla de resinas aromáticas que configuran el incienso, en cualquiera de sus formas, podría estar poniendo en peligro la salud de todas las personas que respiran el aire de tu casa.
Encender una varilla o un cono de incienso dentro de nuestra casa puede parecer un gesto inocente, aunque la realidad es muy diferente. Y es que en su composición, en la que se mezclan numerosos componentes aromáticos, también hay hueco para compuestos químicos que pueden llegar a afectar gravemente a la salud humana.
Pero que no cunda el pánico, ya que esto ocurriría al someterse continuamente a estos humos, y no debería de ocurrir nada si encendemos incienso de manera ocasional, tal y como añadía también Boticaria García: «No pasa nada por encender una varita de vez en cuando, pero no hay que tenerlo de forma continuada», añadía en su discurso.
Otro de los elementos que se utilizan para ambientar las estancias de casa son las velas. Y aunque puedan parecer inofensivas, a través de su mecha también pueden afectar gravemente a la salud de todas aquellas personas que se exponen de manera continuada: «Todas las velas generan hollín al quemarse, y eso acaba en los pulmones» afirmaba Boticaria García en sus declaraciones televisivas.
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