Desde que su mujer está embarazada ha dejado de tener sexo ya que ella al principio no se encontraba bien pero ahora se siente gorda y fea y no le apetece desnudarse frente a su marido.
Cuando una mujer está embarazada, su humor y autoestimacambia con frecuencia. Las hormonas están como locas y se puede pasar de la alegría a la depresión en cuestión de minutos.
La pareja nunca debe cansarse de ello, es normal que se llegue a un límite, pero hay que aguantar dado que no es culpa de ellas, se trata de algo natural.
Siempre se les debe apoyar en este momento duro de tantos cambios y decirles lo guapa que van cada día. Tampoco hay que preocuparse pero sí ocuparse. Si existe una necesidad de ayudar a la pareja embarazada, se debe hacer en la medida de lo posible, con pequeños detalles que le ayuden a estar feliz la mayor parte del tiempo.
Lo conveniente sería englobar todas las cosas buenas y que a uno le guste sobre su mujer y que ella se de cuenta que es querida por su marido o pareja.
En cuanto al sexo, no hace falta llegar al coito para tener relaciones sexuales. Se puede comenzar con caricias, besos, abrazos y luego si surge, intentar aprovechar el momento íntimo.
Damián tiene que despreocuparse. El embarazo es un momento particular con muchos cambios y que le ocurre a la mayoría de las mujeres en esa fase.
Si ve que está deprimida lo que tiene que hacer es un mural con palabras bonitas que definan a su mujer y retratarlo en alguna parte del hogar en donde viven.
Si algún día se siente con bajón emocional, podría visitar ese pequeño lugar dentro de casa y ver que su marido le quiere de una manera extraordinaria.
Lo primordial es ayudar en lo que sea a la pareja y que sea una buena experiencia el embarazo.
