Eurovisión 2017 ¿El año del mono o del gallo?

Álvaro Díaz

Llega la semana grande de la música, lo que para los futboleros es la Eurocopa, para nosotros es Eurovision. A pesar del desánimo que nos provoca la poca implicación de la delegación de España de RTVE. 

Nosotros los eurofans ponemos toda la carne en el asador y de nuevo haremos de esta, una semana llena de música y pasión, deseándole toda la suerte a Manel Navarro con su «Do it for your lover» un tema que en principio estaba planteado para cantarse integro en inglés, pero que a última hora sólo se quedó en este idioma el estribillo, algo que los que amamos nuestro idioma agradecemos.


Este año hay dos grandes favoritos para llevarse el micrófono de cristal, y los dos son países vecinos y del sur, Portugal e Italia. Comencemos con el italiano Francesco Gabbani, que ganó el festival más antiguo de nuestro continente, el de San Remo, si, no nos equivoquemos, el de Italia es más antiguo que el propio Eurovision Song Contest, que fue creado a imagen y semejanza del italiano.

Francesco lleva a Kiev una divertida canción titulada ‘Occidentali’s karma’ que ya ha hecho las delicias de medio mundo convirtiéndola en la canción de Eurovision con más reproducciones en YouTube de la historia del festival, más de 100.000.000. Y no es de extrañar por la simpatía del intérprete y del baile del gorila, y no, no está Melody por ahí con sus golillas, pero si un gorila que acompaña a Francesco en la pegadiza coreografía que hace más original la puesta en escena. ¿Viviremos un Eurovision Milán 2017?

Vamos con el otro gran favorito de este año, y contra todo pronóstico un país que ni por asomo podríamos haber imaginado que diera la sorpresa. Portugal, con una deliciosa balada que solo con los primeros toques de violín ya pone los vellos de punta y el corazón en alerta. ‘Amar pelos dois’ interpretada magistralmente por Salvador Sobral. Salvador ganó la selección nacional del país metiéndose a los vecinos lusos en el bolsillo tanto por su delicadeza a la hora de interpretar el tema si no por la delicadeza de su corazón.

Salvador padece una grave enfermedad de corazón que le hace estar pendiente de un urgente transplante de corazón y que le está impidiendo realizar los ensayos previos a las semifinales, pruebas que está realizando su hermana, autora de la canción. Toda esta historia tan emocionante hace que todo toque más el alma escuchando la canción, yo pediría que le dedicarais 3 minutos a disfrutarla y vierais lo bonito que canta Salvador.

La música genera muchas cosas, una de ellas es pasión, y eso es lo que Eurovision nos transmite y lo que debe de provocar. El sábado volveremos a reunirnos como cada año alrededor de la televisión para disfrutar del evento televisivo número 1 del año con respeto de todos los futboleros.

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