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¿Se puede olvidar una infidelidad?

Redacción Cadena Dial

Si alguna vez has sufrido la infidelidad de tu pareja, es muy probable que ya le hayas encontrado su lado bueno a lo sucedido. Lo que quizá no tengas tan claro es si podrás, o no, olvidar algo que, en su momento, se convirtió en un justificado motivo para sentirte fatal e incluso para juzgar el comportamiento de la persona por la que sentías lo máximo.

Perdono, pero no olvido

Esta puede ser tu frase de cabecera y es totalmente lógico. Si tenías una relación de pareja ideal, o problemática, es mucho mejor dialogar que optar por otra persona. El daño es letal y terminará por afectarte como persona al considerarte culpable de la actitud ajena.

Recientemente, un estudio confirmaba que más del 80 % de personas perdonaría una infidelidad, pero nadie hablaba del olvido. Sin embargo, aunque no puedas o te parezca casi imposible, debes olvidar esa infidelidad para seguir avanzando como persona.


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Consejos prácticos para olvidar una infidelidad

Independientemente de que hayas seguido o no con esa persona, hay una serie de factores que debes tener en cuenta para que una infidelidad no te amargue la vida.

No eres culpable de nada. Si has respetado a tu pareja y no has caído en ningún tipo de tentación, ¿por qué te consideras culpable? En todo caso, es la otra parte la que debería reflexionar tan intensamente como tú lo haces. Que duele, seguro, pero que amargarte la vida no te va a ayudar a nada, también.

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Todas las personas no son iguales. Se dan casos en los que una persona ha estado con distintas parejas y jamás se ha librado de la infidelidad. Esto no significa que no haya otra persona que pueda llegar a serle leal. El amor es algo que te manda el destino y que no se puede forzar por el mero hecho de no querer estar solo en el mundo.

Mide el amor que sientes por la otra persona. Si crees que esa persona merece la pena y es el amor de tu vida, puedes intentar la reconquista. Hablando se entiende la gente, por lo que no estaría de más preguntarle qué ha sucedido, qué piensa de su infidelidad y si ha sido, o no, algo puntual. Recuerda que hay dos tipos de infidelidades: las de cintura para abajo (que nos puede pasar a cualquiera, pero que son pasajeras) y las del cuello para arriba (que son mucho peores al estar en un estado latente durante toda la jornada e incitar a una persona a vivir un engaño permanente).

Olvidando la infidelidad abrirás la puerta a una nueva etapa personal. Bien sea al lado de tu pareja, bien en solitario, es algo doloroso que debes dejar atrás para seguir avanzando. Tan pesado lastre no te ayudará, precisamente, a pensar en la parte más bonita del amor – que también la tiene – y sí en una amargura interminable que no tiene demasiado sentido.

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Entendemos que cuando te hieren de esta forma parece imposible pensar en estos términos, pero de todo se sale en esta vida salvo de la muerte. Quizá, el destino te haya abierto los ojos para que veas mejor cómo es esa persona o incluso para que vieras cómo eres en realidad.

De la imagen que obtengas dependerá tu decisión futura. Eso sí, no dudes en escoger aquella que te ofrezca mayores garantías de felicidad. Vivir dándole vueltas al mismo tema durante años es la mejor manera de evitar que veas que hay otras personas esperándote.

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