La profesión frustrada de David Otero: «Me marché llorando con mi ilusión por el suelo»

Noelia Bertol

Unos hablan de destino y otros de una sucesión de experiencias que nos llevan hacia un lugar en concreto. Sea como sea, lo cierto es que la historia de David Otero con la música podría haber sido muy diferente, o incluso no haber sido. Y todo por una mala experiencia con una persona que despreció su trabajo como ilustrador, la profesión a la que inicialmente aspiraba el madrileño.

Él mismo se ha encargado de contar la historia a través de sus redes sociales, las cuales están siendo una fuente de desahogo para el artista estos días de confinamiento. Con el tiempo libre ha retomado algo que de vez en cuando le gusta hacer, dibujar, aunque esto le haya hecho recordar la situación que vivió hace unos años.

 


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Retomando mi conexión con el dibujo, sabes que antes de ser músico, quería ser ilustrador…? A los 18 años presenté a un estudio de animación todos mis dibujos, la persona que me entrevistó me dijo que no tenía mano, así que no valía para ese trabajo… Al salir de la entrevista, en la puerta, tiré todo lo que había pintado en mi vida a un contenedor y me marché llorando, con mi ilusión por el suelo… Esos días las guitarras y las canciones fueron mi refugio y comenzó acelerarse mi conexión con la música! Ya tocaba y tenía mis grupos, pero desde ese momento, el tiempo que dedicaba a pintar, lo empecé a dedicar a componer… Entonces, me hicieron una putada? O un favor? El que me dijo que no valía fue un cabrón o un Ángel…? desde entonces a penas pinto un par de veces al año, igual un día me pongo a pintar un poco más en serio!!! Aquí os dejo a @marinaroveta en versión dibujo!

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Con tan solo 18 años un jovencísimo David se dirigía a una entrevista de trabajo en un estudio de animación. Rebosante de ilusión y cargado con sus trabajos, se topó con una persona que indudablemente cambiaría su destino.

«Me dijo que no tenía mano, así que no valía para ese trabajo… Al salir, en la puerta, tiré todo lo que había pintado en mi vida a un contenedor y me marché llorando con mi ilusión por el suelo…«, ha expresado el artista en sus redes.

La música, su refugio

 

Esta experiencia, confiesa, le hizo refugiarse más que nunca en la música. «Desde ese momento, el tiempo que dedicaba a pintar lo empecé a dedicar a componer«, añade, lo que le hace plantearse una duda, y es si esa persona le hizo «una putada o un favor«.

Dos años más tarde de este acontecimiento, David Otero estaría embarcándose en la aventura de El Canto del Loco junto a su primo Dani Martín. Lo que viene a continuación es una historia que conocemos, la cual es al mismo tiempo parte de la historia de la música.

Puede que, si ese día hubiera David hubiera tenido la entrevista con otra persona, y a esta le hubiesen conquistado sus dibujos, no conoceríamos la banda de éxitos como Zapatillas o Peter pan tal y como la conocemos ahora. Y puede que tampoco llevara 20 años subido a los escenarios.

Sin embargo, no podemos cerrar este artículo sin mencionar que nadie debería tener el poder de echar por tierra los sueños de una persona. El arte tiene muchísimas interpretaciones, no hay una verdad absoluta para este. Por eso mismo, una persona no puede decidir jamás qué es arte y qué no.

Afortunadamente, nos encanta saber que de vez en cuando el artista sigue pintando lienzos en blanco, pues junto a la anécdota nos ha compartido un dibujo de su chica que él mismo ha realizado.

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