Cuando suena algo de Estopa, no hay persona que no baile ni pueda evitar tararear al menos sus estribillos. Después de más de 20 años en activo, el dúo rumbero no ha dejado de regalar buena música.
Su afición a la guitarra se debe a las influencias que recibieron cuando eran aún pequeños. Grupos como Los Chichos y Los Chunguitos eran los que servían de fuente de inspiración en los tiempos de instituto de los hermanos.
Antes de dedicarse plenamente a la música, Estopa se fue buscando la vida en diversos trabajos. Gracias a esta experiencia, pudo surgir el nombre de la banda. Cuenta la historia que estuvieron trabajando produciendo piezas de automóvil en Novel Lahnwerk, una fabrica de la SEAT, donde el encargado gritaba ‘¡Dale estopa!’ para que no cesara el trabajo. De este alarido surgió el nombre de uno de los grupos más conocidos de la música en español.
Acumulando éxito tras éxito, han sido los encargados de la cabecera de El Regreso de Los Hombres de Paco con la canción titulada El Madero.
Dejamos una lista de canciones que te pueden hacer recordar momentos en los que cuando sonaba Estopa, era una garantía de buen rollo.
Canciones de Estopa para celebrar su historia
La Raja de tu Falda – Estopa
Con esta canción el grupo dio un salto a la fama inmenso. Estas letras comenzaron a idearse cuando estaban en la SEAT y la música era su vía de escape.
No se que me dió por la espalda Cuando ví la raja de tu falda Que un Seat Panda se me cruzó Y se comió el parachoques de mi Ford Escort
Por la raja de tu falda yo Tuve un piñazo con un Seat Panda
Cuando Amanece
Que yo me pongo a pensar
Ser un poquito más libre
Y poder remontar el vuelo
Contigo quiero volar
Para poder verte desde el cielo
En busca de un imposible
Que se escapa entre mis dedos
Como Camarón
¿Quién no ha cantado el estribillo de esta canción a pleno pulmón?
Tú me rompes las entrañas Me trepas como una araña Bebes del sudor que empaña El cristal de mi habitación Y después por la mañana Despierto y no tengo alas Llevo diez horas durmiendo Y mi almohada está empapada Todo había sido un sueño Muy real y muy profundo Tus ojos no tienen dueño Porque no son de este mundo Que no te quiero mirar
