lucia domingín en la ultima cena

Lucía Dominguín, muy emocionada en ‘La última cena’ al recordar a Bimba, su hija fallecida

Aitana Alonso

La última emisión de ‘La última cena’ ha dado mucho de qué hablar. Cristina Cifuentes y Lucía Dominguín han sido las encargadas de cocinar, pero no ha sido una noche fácil. Las dos se han enfrentado a mucha presión y estrés debido a las críticas y presiones que han recibido por parte del chef Miguel Cobo.

Ambas se esforzaron mucho por conseguir el éxito y el aprobado por parte de sus comensales. Finalmente, todos los momentos de llantos, agobios y presiones merecieron la pena ya que su cena fue muy bien puntuada.

Sin embargo, antes de conocer la puntuación y las opiniones de sus comensales, ambas cocineras recibieron una sorpresa muy especial. De alguna manera, era bonito que su familia estuviese apoyándolas en una noche tan importante.

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Ambas recibieron las videollamadas de sus familiares. Las charlas fueron tan bonitas que incluso las puntuaciones subieron debido a la emotividad del momento. Sobre todo, Dominguín causó mucho sentimiento cuando pudo hablar con sus hijos: Palito, Jara y Olfo.

La cocinera contó en directo que siempre ha dado todo para no fallarlos. “Es que son mi debilidad. Pero esto no va de llorar, va de alegría”.

Y es que la conversación hizo que el plató se tiñese de una sensación de añoranza donde la mayoría tenía lágrimas asomando de sus ojos. El momento clave fue cuando Dominguín dijo unas palabras que afectaron mucho a Paz Padilla, entre otros. “La que más me enseñó fue Bimba con su partida. Ahí te das cuenta de que nacemos para morir, pero la muerte es un paso más allá. Es la muerte de este físico, no de tu corazón, de tu alma, de tus amores…”