Blas Cantó

5 himnos de Blas Cantó para dar la bienvenida a su nueva era

El artista lanza el jueves 16 El bueno acaba mal

Noelia Bertol

Hace unos días en Cadena Dial pudimos conocer de forma anticipada cómo suena el nuevo proyecto que Blas Cantó tiene entre manos. El artista llega el jueves 16 de junio con El bueno acaba mal, la canción con la que arranca una nueva era y que será el primer sencillo de su próximo disco.

El artista nos confesaba que este nuevo proyecto viene para romper con la tónica de los últimos años, y es que hace dos años se instaló la oscuridad en la vida del artista. Este nuevo álbum supone una explosión de color con el que viene a decirnos eso de: «ahora me toca a mí«.

No obstante, para entender la era en la que se adentra Blas Cantó es importante saber de dónde viene. Desde el fin de Auryn el murciano decidió seguir apostando por la música en solitario y consiguió dejar huella con canciones que han marcado la última década.


Blas Cantó a través de cinco himnos

 

Hoy queremos destacar 5 de los himnos que Blas nos regaló en el pasado y que son imprescindibles para entender en quién se ha convertido.

1. Él no soy yo 

Él no soy yo es, probablemente, el mayor éxito en la carrera de Blas Cantó hasta la fecha. Una canción que habla de nuevas oportunidades de la mano de una nueva persona que aparece en nuestra vida.

2. No volveré (a seguir tus pasos) 

El amor y el desamor son los principales temas que marcan las canciones del murciano. Este habla de ese punto de la relación en el que uno ha tomado la firme decisión de continuar sin el otro.

3. Si te vas 

De los temas más vitalistas que el artista tiene en su repertorio. Aunque habla de desamor lo hace desde una postura en la que todo parece más superado.

4. Universo 

Fue el tema con el que Blas iba a representar a España en Eurovisión en el año 2020. Una canción en la que el artista se pedía perdón a sí mismo y al universo por las cosas que nunca dijo.

5. Voy a quedarme 

Y en la misma línea, no podía faltar Voy a quedarme, el tema que finalmente pudo llevar a Róterdam. Una canción llena de tristeza y que Blas dedicó a su abuela, fallecida a finales de 2020 a causa de la CoVid-19.