Belén Esteban

Belén Esteban abandona Sálvame en directo por un problema de salud

La colaboradora sufría una bajada de azúcar y tuvo que ser atendida

Noelia Bertol

No es la primera vez que, en pleno directo, Belén Esteban sufre un problema de salud y tiene que ser atendida durante la emisión de Sálvame. De hecho, sonada es la caída que la de Paracuellos sufrió hace casi un año y que le costó la fractura de la tibia y el peroné. Un accidente cuyas secuelas aún arrastra. 

Este lunes, no obstante, era otro problema de salud el que llevó a Belén Esteban a abandonar el plató. La colaboradora sufre de diabetes, una enfermedad de la que ha hablado abiertamente en numerosas ocasiones y que con frecuencia le causa subidas y bajadas de azúcar, por lo que tiene que estar controlándola.

La tarde de este 6 de marzo la televisiva participaba en el debate generado en el programa por la ruptura entre Yulen Pereira y Anabel Pantoja, con quien Belén Esteban tiene una gran amistad. De ahí que no haya dudado en sacar la cara por su amiga y defenderla ante todo lo ocurrido con el esgrimista.


Belén Esteban en Sálvame

No obstante, en un momento dado la colaboradora ha asustado a sus compañeros al pedir ayuda: «Por favor, ¿me podéis traer un sobre de azúcar?» Esta se había dado cuenta de que algo no iba bien cuando la bomba que tiene en el pecho le había comenzado a pitar por los bajos niveles de azúcar en sangre.

Tras tomar un vaso de agua y azúcar y ver que la cosa no se solucionaba tan rápido como esperaba, Esteban optó por abandonar el plató. Esta se había quedado preocupada con lo acontecido y había preferido retirarse para que le hicieran las pruebas oportunas.

Las secuelas de Belén Esteban tras el accidente en Sálvame

Como mencionábamos al principio, la colaboradora sigue recuperándose del accidente que sufrió en directo el pasado abril de 2022. Un accidente del que, si bien parece estar casi recuperada, le ha dejado importantes secuelas. «Voy a tener que volver a pasar por el quirófano porque me tienen que operar de dos dedos porque de la fractura tan grande que me hice se me ha quedado el tendón cogido en los dedos y los tengo doblados», ha confesado a la revista Semana.

Este problema le impide llevar tacones o conducir, pues «no tengo aún fuerza para acelerar y frenar«. A pesar de todo, afronta la situación con positivismo, hecho en el que influye la ayuda psicológica que recibe: «El psicólogo me está ayudando mucho y sé que aunque he pasado por momentos malos, ahora tengo que mirar adelante y no puedo mirar para atrás«.