En función del comportamiento de los hijos o del rol que decide tomar un padre al comenzar su experiencia en la paternidad, los progenitores adquieren un estilo o una forma de ser que se diferencia según sus conductas. Existen los padres helicóptero, los sobreprotectores, los controladores, las madres tigre, etc.
En este caso hablamos de los padres quitanieves, también conocidos como padres excavadora. Este nombre puede parecer broma, pero el significado concuerda mucho con la verdadera descripción de lo que sucede a los padres que toman unos comportamientos muy marcados. Se llaman así porque son los padres los que van despejando cada paso del camino de sus hijos, allanándolo y evitándoles problemas para que no afronten dificultades a diario.
Si aún no te ha quedado claro de qué trata o cuáles podrían ser las señales que caracterizan a los padres quitanieves, enseguida te lo contamos. Fue el historiador, conferenciante y exprofesor David McCullough quien abordó este término por primera vez en 2015 en su libro ‘No eres especial’. En estos escritos, el estadounidense hace hincapié en que hay un momento en la vida de los hijos en que los padres deben echarse a un lado y dejar que los hijos fracasen, se equivoquen y se tropiecen con el día a día a día.
Así actúa un padre quitanieves
Facilitan excesivamente la vida a sus hijos
La característica principal de estos padres es que les allanan el camino a sus hijos, poniéndoles las cosas fáciles y evitando que afronten cualquier dificultad que se pueda presentar. De este modo, les privan de oportunidades que, aunque les puedan hacer caer, les serviría de crecimiento y aprendizaje.
Frenan su independencia
Este tipo de padres detienen la independencia de los hijos por temor a que lo pasen mal. Queriendo ahorrarles un sufrimiento hacen cualquier cosa por ellos y no dejan que descubran el mundo por ellos mismos. Desde las necesidades básicas personales hasta las relaciones con los demás.
Interfieren en su vida social
Se involucran demasiado en la vida social de sus hijos, influyendo en las amistades que el niño elige o interviniendo en conflictos con sus amigos, en vez de dejar que sean ellos los que resuelvan sus problemas o los que decidan con quiénes deben juntarse.
Una de las características es el estilo de crianza autoritario ya que, incluso sin darse cuenta, exigen a sus hijos tener gran éxito o esperan que lo tengan, pero quitándoles todos los obstáculos mencionados anteriormente, será difícil que logren ese éxito en cualquiera de sus formas. Las limitaciones referentes en los otros apartados influyen en el resto, por lo que, si no consiguen por su cuenta lo anterior, tampoco conseguirán este último.
Evitan el fracaso y sus consecuencias
Para estos padres los errores o los tropiezos no existen. Se anticipan a cualquier tipo de fracaso y rescatan a los hijos, lo que conlleva una falta de responsabilidad y efectos negativos en la capacidad de los pequeños para enfrentar desafíos y desarrollar autonomía o confianza.
