Hemos hablado o más bien escrito mucho sobre esto: un buen descanso es fundamental para estar bien física y mentalmente. Lo que ocurre es que algo aparentemente sencillo no lo es tanto en algunos momentos de la vida. Hoy precisamente nos detenemos en un método importando de los países escandinavos para conseguir un sueño reparador: El ‘método del edredón escandinavo’.
Una tradición de los climas nórdicos más fríos, explica el médico especialista en sueño Walt Pickut, que consiste en «sacar el edredón al aire ártico, con la funda incluida, y dejarlo fuera durante cuatro horas».
Algo tan sencillo como airear el edredón después de dormir hará que se vayan todos los microorganismos y células muertas «que se van acumulando y que pueden generar problemas en la piel y el cabello«, explican desde welife.es.
Los beneficios de practicar el método del edredón escandinavo
El sistema se ha hecho famoso ya en TikTk, donde la usuaria Cecilia Blomdahl que vive en Svalbard, Noruega habla de sus ‘bondades’: «En primer lugar, hace que la cama esté fresca y esponjosa. Pero también mejora la calidad del sueño, pues cuando dormimos, sudamos y respiramos, y la humedad se queda en la ropa de cama».
El método además tiene beneficios tanto en verano como en invierno, ya que «cuando hace calor, el sol tiene propiedades antibacterianas pero cuando las temperaturas son bajas, el aire puede hacer que se liberen los efectos de la humedad ambiental».
Además, explica Blomdahl que las sábanas frescas ayudan a regular la temperatura corporal y esto a su vez nos hará conciliar mejor el sueño y tener un descanso de calidad al sentirnos mejor y más cómodos. Y si no tienes un balcón o terraza donde airear tu edredón, al menos ventila la habitación abriendo persianas y ventanas y dejando pasar la luz del sol al menos una hora, ya que la luz solar tiene propiedades desinfectantes.
Y es que la luz del sol puede ayudar a eliminar los olores desagradables causados por el sudor y los aceites naturales liberados por el cuerpo, explica Rachel Marshall gerente de marca de Bensons for Beds, que habla de otro de sus beneficios, puede incluso «ayudar a restaurar el volumen de tu edredón, lo que ayuda a darle esa sensación mullida que se pierde gradualmente con el tiempo».
Pero además airear nuestro edredón ayuda a reducir la humedad. Y es que a través de la respiración y la transpiración perdemos alrededor de medio litro de agua cada noche, que según explica el Dr. Walt Pickut«queda atrapada en nuestra ropa de cama, lo que proporciona un caldo de cultivo potencial para los ácaros del polvo y el moho, que son dañinos para nuestra salud respiratoria y pueden interrumpir el sueño. Ventilar el edredón puede ayudar a eliminar la humedad y los alérgenos».
