Comer sano

Así es la regla 40/30/30 en alimentación que ralentiza el envejecimiento a partir de los cuarenta

La base está en consumir un 40% de carbohidratos, un 30% de proteínas y un 30% de grasas saludables a lo largo del día

Ana Más

Hace unos meses nos referíamos a un estudio que proporcionaba pruebas científicas de que los cambios en el estilo de vida y la dieta pueden ocasionar una reducción inmediata y rápida de nuestra edad biológica. Algo que puede ayudarnos a vivir mejor y más tiempo, ya que el envejecimiento es el principal impulsor de las enfermedades crónicas. Hoy vamos algo más allá y te hablamos de la regla 40/30/30

Y es que la regla 40/30/30  puede ayudarnos en este sentido, su base está en la distribución de la proteína, que desempeña un papel fundamental en el refuerzo muscular, en nuestra dieta. 

«Muchas personas consumen cantidades insuficientes en el desayuno, moderadas en el almuerzo y una cantidad excesiva en la cena, lo que conduce a una situación donde el cuerpo no aprovecha plenamente parte de esta ingesta calórica», explican desde The Objetive.


Así funciona la regla  40/30/30 

cáncer alimentación

Según David Heber, presidente del Instituto de Nutrición de Herbalife, para alcanzar un equilibrio óptimo de macronutrientes y micronutrientes, debemos ingerir: un 40% de carbohidratos, un 30% de proteínas y un 30% de grasas saludables a lo largo del día.

Esta combinación equilibrada «proporciona los nutrientes esenciales para mantener la energía, la masa muscular y la salud general», matizan desde El País. Y es mucho mejor si se trata de carbohidratos complejos (granos enteros, frutas y verduras), que proporcionan energía sostenible y nutrientes clave, además de evitar los picos de insulina, al mantener un nivel adecuado de glucosa en sangre. 

Por su parte las proteínas, son esenciales para el mantenimiento de los tejidos a medida que envejecemos y estas deben ser de calidad, como las que nos aportan la carne magra, el pescado, los huevos y las legumbres. Y por último las grasas, que obtenemos de alimentos como frutos secos, aguacates, aceite de oliva y pescado graso, son «fundamentales para la función cerebral, la salud del corazón y la absorción de vitaminas liposolubles», explican desde el mismo medio.