Los alimentos que deberías dejar fuera del frigorífico (y probablemente no lo hagas), según los expertos
Las bajas temperaturas podrían dañar ciertos productos
Seguro que alguna vez has dudado sobre qué hacer con ciertos alimentos: ¿Mantenerlos en el frigorífico o guardarlos en la despensa?
En muchas ocasiones optamos por lo fácil y los metemos directamente en la nevera sin pensar en cuál es la mejor forma de conservarlos, ya sea por falta de espacio o simplemente por pereza a la hora de reorganizar las estanterías.
Según Isabel Campelos, asesora del Centro de Investigación y Seguridad de Alimentos de Leatherhead (Reino Unido): «Tratar de que la comida dure más tiempo y que en ese período no aparezcan microorganismos que la dañen e impidan consumirla son las principales razones para recurrir a un refrigerador».
Sin embargo, en algunos casos, esta práctica puede dificultar la conservación. Por ello, aquí tienes algunos alimentos que no deberían guardarse en el frigorífico:
Alimentos que deben permanecer fuera del frigorífico
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La mantequilla: aunque forma parte de los lácteos, no funciona igual que la leche, por lo que no es necesario conservarla en frío.
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El pan: las bajas temperaturas favorecen su deshidratación.
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Los huevos: es importante consumirlos antes de la fecha de caducidad para evitar intoxicaciones. No está demostrado que guardarlos en la nevera aporte beneficios.
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Chocolates y frutos secos: el frío altera sus propiedades y disminuye su sabor.
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Frutas tropicales: están adaptadas a climas cálidos, por lo que lo ideal es mantenerlas a temperatura ambiente. Algunos de estos ejemplos son el mango, el plátano o la piña.
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Las patatas: deben conservarse en lugares frescos, pero no a bajas temperaturas, ya que esto aumenta su contenido en azúcar.
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Ajos y cebollas: al ser alimentos secos, los cambios bruscos de temperatura favorecen su oxidación y deterioro más rápido.
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