No nos vamos a engañar, Pablo Alborán tiene una cara que nos encanta. El de Málaga sabe cómo salir guapo en las fotos, de eso no cabe duda. Pero también es muy expresivo y sabe jugar mucho con los gestos, y cuando algo no le gusta, ¡se le nota!
Hoy en Cadena Dial te traemos ¡un Pablo Alborán para cada situación!
¡Estamos contentos!
Estos días están siendo muy especiales para Pablo, que acaba de estrenar Prometo, uno de los discos más personales para el artista con el que ¡promete triunfar mucho! Él lo está disfrutando, pero tú… ¡este eres tú cuando escuchas las canciones!
Pero cuando llegas a un concierto del malagueño la emoción es mayor. ¿Te imaginas escuchando Prometo en directo al piano? Nosotros reaccionaríamos tal que así:
Se acerca la Navidad, seguro que ya estás pensando en los nuevos propósitos de año que muchas veces se repiten porque este 2017 no los cumpliste. Tu familia ya no te cree cuando dices que esta vez te apuntarás al gimnasio y no dejarás de ir al mes siguiente, o que ese cigarro es el último. Pero tú vas en serio, ¿verdad?¡Con el uso de este gif te comprometes!
Aún no tienes el disco porque estás esperándolo como regalo de Navidad, pero tus amigos empiezan a contarte que se han ido todos en trompa a comprarlo y que han agotado las existencias. No hacen más que hablar de lo genial que es tener el álbum. Y tú mientras estás como:
¡Y no hay quien los calle! Empiezan a contarte que tienen la versión Superdeluxe con postales de fotos suyas, un calendario para el nuevo año, el disco en vinilo, en CD y un cuaderno muy personal del artista…
Pero tranquilo, se acerca la Navidad y, ¡sorpresa!Pablo Alborán anuncia concierto en tu ciudad y tus amigos, que antes te restregaban su disco, ¡te han comprado una entrada para ir con ellos!
Te vas de fiesta con tus amigas pero, en la mitad de la noche, el grupo se ha dividido. Vas al baño un momento y cuando vuelves te das cuenta de que una de ellas ha hecho muy buenas migas con alguien con quien habla al otro lado de la barra.
¿Te han gustado las caras de Pablo Alborán para estas situaciones cotidianas? ¡Aún nos queda una! Y es que la más especial la queríamos dejar para la despedida. Aquí te deja Pablo un mensajito:
