Si hablamos de este país, es un pecado no mencionar a Bob Marley, artista al que dedicaron todo un mausoleo tras su muerte. Junto a sus restos se encuentran una guitarra, un balón de fútbol, una Biblia y un cogollo de marihuana -y sí, en Jamaica está totalmente prohíbida la droga-.
Otro dato curioso es la monumental casa que tenía allí el escritor Ian Fleming, autor de las obras literarias de James Bond. Con jacuzzi, seis baños y calas secretas y privadas… Decidió llamarla «El Ojo de Oro«. ¿No te suena de algo…?
La isla de Jamaica también es popular por sus piratas. Uno de los más históricos y conocidos es el pirata Morgan, con numerosas artimañas para dominar la bahía de Kingston. No tenía ni una pata de palo, ni garfio ni un parche en el ojo; eso sí, era el más temido de todos.