Cuando Bill Gates habla, todo el mundo escucha, y es que el fundador de Microsoft se ha convertido en una de las personalidades más destacadas en esta pandemia. El magnate pronosticó hace seis años los peligros que un virus podría ocasionar a nivel mundial por la falta de capacidad de actuación para hacerle frente, así como vaticinó que la vacuna Pfizer sería la primera en ponerse en marcha.
Ahora este, tras poner su foco de atención en los peligros que puede ocasionar el cambio climático a corto-largo plazo, nos ofrece una nueva actualización de la situación de la pandemia y cuánto tiempo más tendremos que vivir limitados por el virus.
Gates, que está en plena promoción de su nuevo libro, Cómo evitar un desastre climático, asegura que este verano se habrá recuperado prácticamente la normalidad de nuestras vidas aunque deberemos esperar a 2022 para poder celebrar grandes actos públicos».
Aunque la situación actual de restricciones y que el proceso de vacunación no se está llevando a cabo todo lo rápido que se esperaba, Bill Gates asegura que 2021 será el año en el que se controlará la situación «casi totalmente«, siendo el próximo año, en 2022, cuando podremos hablar ya de un regreso a la antigua normalidad. Por entonces, «se podrán celebrar grandes actos públicos«, anunciaba en una entrevista concedida a El País.
Por entonces asegura que «habremos superado en gran medida los efectos más dramáticos de la pandemia«. Eso sí, hay que tener en cuenta que el virus puede continuar en nuestras vidas, aunque no con la fuerza que ahora tiene, pues con el 70% de la población vacunada se puede comenzar a hablar de una inmunidad de rebaño que permitiría que las tiendas abrieran de nuevo en todos los puntos del país y que pudieran volver a realizarse espectáculos o eventos públicos.
Según el filántropo, no habrá que esperar hasta 2022 para disfrutar de una normalidad parecida a la que teníamos antes de la pandemia, pues este verano «las cosas volverán en gran medida a la normalidad«, aunque tengamos que seguir llevando mascarilla y guardando distancia de seguridad, la vida comenzará a parecerse algo más a lo que recordamos como la antigua rutina.
«La cuestión ahora es si seremos capaces de reducir la cifra de contagios a cero o si se convertirá en una enfermedad endémica y tendremos que seguir vacunando a un nivel más o menos alto de manera continuada», añadía este. Justo esta postura es la que barajan numerosos expertos que, estudiando el comportamiento del virus y el surgimiento de nuevas cepas, consideran una opción no descartable tener que vacuna cada año como ocurre con la gripe.
Las nuevas cepas, como la británica, la sudafricana o la brasileña no preocupan tanto a Bill Gates, que considera que el desarrollo de las vacunas podrá superar esta prueba. Lo que sí genera gran preocupación en el empresario es otro aspecto diferente, el cambio climático.
Este ha aprovechado el altavoz que ahora le ha sido concedido para advertir de los peligros a los que en unos años nos podemos enfrentar a causa de este. Sus consecuencias, asegura, serán mucho peores que las de la pandemia.
